Pues sorpresa no fue, porque ya lo habían anunciado, pero la decisión de apretar el Botón de Emergencia por covid-19 en Jalisco tuvo a todos en vilo primero, y después con un sentimiento de entre resignados y dudosos sobre su operación, por más que los funcionarios se esforzaron en aclarar todo lo posible en torno a los 14 días de restricciones. Dos puntos de los recetados ayer son los que despertaron más inquietudes: el referente a los taxis, y el de la venta de comida, sobre todo en puestos callejeros y fondas caseras. En el caso de los taxis se suspendió en horas de la noche y fin de semana el servicio de plataforma. Sólo los que antes eran taxis amarillos podrán dar servicio ininterrumpido, aunque con tarifas controladas, lo que despertó sospechas de que la autoridad busca congraciarse con ese gremio antes de las elecciones de 2021. El de los puestos y fondas será difícil de controlar, pues garnacheros como somos, habrá quien abra su negocio incluso por desconocimiento, y con seguridad tendrá clientes “aunque sea para llevar”. Mañana comienza el primer día de la catorcena jalisciense. A ver cómo transcurre.
Quienes han seguido de cerca el proceso de las mesas sanitarias y económicas de la epidemia en Jalisco refieren que el sector más duro a la hora de tratar cierres y restricciones ha sido el de los restauranteros, que representa Aldo de Anda. El tema es que por el hecho de ser muchos, estar bien organizados, y sobre todo porque de ellos dependen muchos empleados, han buscado inclinar la balanza a su favor a la hora de ver los horarios de cierre de sus establecimientos, o en su caso recibir ayudas económicas por parte de la autoridad, lo que no se ha logrado. Los alcaldes de los municipios metropolitanos tienen la encomienda de reforzar la vigilancia en torno a todo negocio en su territorio, y dado la enorme cantidad de restaurantes y similares, seguramente tendrán que dedicar su tiempo a mantener la observancia de la ley (ésta última frase sonó como Cantinflas en El Patrullero 777). ¿Cómo dice que me dijo?
Aristóteles Sandoval nomás nos dejó picados con el asunto de su renuncia. Desde ayer todos revisamos cada hora sus redes sociales, a ver si ya nos cuenta el meollo del asunto.