Hace poco, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció una serie de decretos y medidas para beneficiar a ciertos presos sin sentencia después de años, torturados en el proceso, de cierta edad y con ciertas enfermedades.
Ese proceso aún no arranca, pero hay otro también envuelto en un halo de humanismo y justicia que nos puede anticipar cómo saldrá el recién anunciado: las amnistías prometidas. El reporte hecho público por la Comisión de Amnistías dice que se han recibido mil 560 casos, pero solo se han analizado en sesión 568; 747 están aún en revisión y 245 no tienen datos.
Será tal vez porque la Comisión solo ha sesionado cuatro veces en 16 meses, por lo que ha incumplido con el mandato de ley que indica que las solicitudes tienen que ser resueltas en cuatro meses.
Hasta hoy solo hay 47 casos “procedentes”; 35 de esos ya han sido beneficiados. Y además del informe, como lo señaló el Observatorio de Amnistías, un conjunto de organizaciones de la sociedad civil dedicado a dar seguimiento a esta ley: “Del total de casos sesionados, procedentes e improcedentes, así como de los casos en revisión, se omitió señalar en su totalidad los motivos por los cuales fueron solicitados los beneficios de amnistía. Esta información únicamente se proporcionó de los casos en revisión. Omitiendo cumplir con el mandato de ley de señalar los supuestos por los cuales se otorgaron. Asimismo, no se entregó la información desglosada que permita realizar un análisis interseccional, lo cual es necesario para poder evaluar esta política pública”.
Más preocupante es otro apartado del posicionamiento que emitió el Observatorio: El Instituto Federal de Defensoría Pública que dirige Netzaí Sandoval ha presentado 54 amparos contra la Comisión de Amnistías por su pobre desempeño. La respuesta de la secretaria de Gobernación es señalar a la defensoría en el órgano interno de control del Poder Judicial.
Es decir, las burocracias, la falta de eficiencia y eficacia hacen que las promesas se queden... pues en eso, en promesas. Veremos cómo se implementa el anuncio del Presidente mencionado en las primeras líneas, pero a juzgar de lo hecho con amnistías, no esperemos mucho.
Carlos Puig
@puigcarlos