El dueño de Norte de Ciudad Juárez dejará de publicar el diario porque “no existen las garantías ni la seguridad para ejercer el periodismo crítico”.
El asesinato diez días antes de Miroslava Breach (corresponsal también de La Jornada) fue “el ingrediente principal” de tan drástica medida, pero el “irresponsable incumplimiento de las administraciones públicas de los tres niveles de gobierno también nos orilla a tomar esta decisión, ante la soberbia negativa de pagar los adeudos contraídos por la prestación de servicios...”.
El caso Miroslava remite, entre muchos otros, al asesinato (2009) del reportero de la fuente policiaca Eliseo Barrón Hernández, de La Opinión MILENIO (estamos celebrando sus primeros 100 años) en la Comarca Lagunera: ocho encapuchados cayeron en su casa y, ante su esposa y sus hijitas, lo insultaron, golpearon y secuestraron para después torturarlo y matarlo.
Eran días de guerra entre chapos y golfos y, como con Miroslava, los asesinos dejaron junto al cuerpo un narcomensaje intimidatorio para todos los periodistas de la zona y ningún medio cerró...
