Si bien es cierto que la Inteligencia Artificial generativa se ha convertido en el tema de moda dentro de las conversaciones tecnológicas, no debemos olvidar que desde hace tiempo se está debatiendo, especialmente en occidente, el impacto positivo o negativo que distintas redes sociales tienen en temas de impacto social, emocional y seguridad.
La plataforma de TikTok, se encuentra en el ojo del huracán ya que se ha dicho que esta plataforma podría ser prohibida en occidente por las escasas garantías de seguridad que ofrece y las fuertes sospechas de espionaje que se derivan de esta aplicación.
A esta acusación, será necesario considerar que en la actualidad se vive una ola de problemas psicológicos y deterioro de la salud mental, en el que se ha dicho que las redes sociales y en especial TikTok juegan un papel relevante en este deterioro.
En un estudio muy interesante realizado por una prestigiosa casa editora de Estados Unidos, se demostró que el incremento de baja autoestima y sentimientos negativos en los adolescentes, está íntimamente ligado a la cantidad de horas que ellos pasan conectados a un dispositivo digital y dentro de algún tipo de red social.
Si bien es cierto que existen una enorme variedad de redes sociales, este estudio demuestra que TikTok es la plataforma más adictiva, con un promedio de 26 horas por usuario al mes, cada vez más lejos de las 16 horas promedio de Facebook o las 8 horas de Instagram o WhatsApp.
Las redes sociales manejan algoritmos muy sofisticados que mediante una inteligencia artificial se determina el tipo de contenido que el usuario está observando, para inmediatamente después ofrecer un contenido similar que lo mantenga enganchado.
El estado de ánimo con el que un adolescente entra a sus redes sociales lo lleva a consumir contenido que va directamente relacionado a su estabilidad mental.
La nueva generación de jóvenes se encuentra cada día más desinteresada en la autonomía, es una generación más sedentaria y mucho menos sociable, a menos que esa sociabilidad sea a través del dispositivo electrónico.
Esta situación ha provocado que el sentimiento de soledad entre las nuevas generaciones se incrementó en casi 50% durante la década pasada, esto definitivamente es una pandemia silenciosa que afecta directamente a la salud emocional de nuestros jóvenes.
Para que nos asustemos más, según estadísticas del centro de control de enfermedades de Estados Unidos, entre 2010 y 2020 a nivel universitario, se incrementó en un 140% los casos de depresión, anorexia y violencia excesiva.
El 60% de las chicas adolescentes han estado deprimidas en el último año y el 20% de ellas ha considerado seriamente el suicidio o la automutilación, de igual forma el autoestima se siente dañado lo que ha originado que el 14% de las universitarias norteamericanas han sido forzadas a mantener una relación sexual, solo para poder tener un sentido de pertenecía hacia cierto grupo social.
Aunque muchos de estos estudios tienen como finalidad desacreditar la plataforma china de TikTok, por considerarla peligrosa dentro de múltiples teorías de conspiración, la realidad es que si como sociedad no buscamos acciones o actuamos de alguna forma para regular el consumo de las redes sociales, estaremos condenando a una generación completa a la incertidumbre social y a la enajenación.
La salud emocional de nuestros jóvenes está en riesgo, hagamos algo al respecto.