Recuerda usted que el lunes pasado, los policías de Torreón generaron una manifestación por presuntas malas prácticas por parte de algunos mandos, pues bien, la situación derivó en que el Director de la Policía, César Perales fuera removido de su posición y los elementos se dividieran en varios bandos, unos pedían recursos para el mantenimiento de las patrullas, otros uniformes, otras denunciaron acoso sexual, en fin.
La corporación convertida en una “romería”, fue escenario de enfrentamientos verbales entre unos y otros.
Fue hasta el mediodía cuando el Secretario del Ayuntamiento, José Elías Ganem llegó hasta el lugar para tratar de dialogar con los uniformados inconformes, cometido que no logró, también llegó el Tesorero y el Contralor, ninguno pudo solucionar absolutamente nada, por una extraña razón llegó también la Síndica Natalia Fernández y en un gesto muy desafortunado, una agente sacó literalmente a empujones a la funcionaria, imagínese el grado de ingobernabilidad de imperaba en la corporación, una mujer policía retando físicamente a la autoridad, por supuesto que la pobre Natalia “fue a dar” allá a la calle ante la mirada atónita del Tesorero Óscar Luján Fernández quien solamente levantó las manos cuando la policía ponía de “patitas en la calle” a Natalia, ahí considero que debió intervenir porque las condiciones de ambas no eran las mismas, la agente tiene entrenamiento, estaba armada y la superaba en fuerza, Natalia no tenía forma de defenderse.
Una conjunción de malas decisiones y acciones, Pepe Ganem tampoco logró mucho, los policías tenían varias “guardaditas” y ahí fue el momento, personas que ya habían sido separadas de su cargo también se manifestaron, encararon a la autoridad y eso lo notamos todos.
Por el bien de la corporación, el nuevo titular de la Policía Municipal de Torreón, Alfredo Flores está obligado a analizar todo lo que ocurrió ese lunes “negro” y a deslindar responsabilidades, porque una cosa es manifestar inconformidades de forma puntual y otra cosa es el circo que algunos de los elementos aprovecharon para montar.
Simplemente no deben dejar pasar por alto esta serie de actos, tiene que haber despidos.
La otra es que los integrantes del Ayuntamiento también están obligados a hacer un ejercicio de introspección y recapitular sobre lo que hicieron
¿Fueron buenas sus intervenciones? ¿Lograron sus objetivos?
Creo que al margen de estos cuestionamientos, hubo una total ausencia de autoridad, del Secretario del Ayuntamiento, del Tesorero y de la Síndica, permitieron que ocurriera de todo.
