Ya por fin entramos de lleno a las campañas políticas, porque nada de lo anterior pertenecía a este periodo hacia la elección del 2 de junio, bueno eso decían las reglas, aunque mucho se parecían lo que hacían los aspirantes, precandidatos y ahora candidatos presidenciales hace unas semanas y alguna desde hace unos años.
Que los procesos internos de selección, las promociones de aspirantes para militantes de tal o cual partido, que el periodo de intercampañas, que no podían hacer mucho para promoverse ni mucho menos hacer propuestas porque todavía no llegábamos a las campañas, pero todo eso ya terminó, ahora sí la lluvia de spots en radio y televisión arrecia y nadie se salva, de aquí hasta el periodo de reflexión, para pensar por quién votaremos, y después iremos a las urnas.
Como la polarización está sembrada desde hace cinco años desde el Palacio Nacional, los ánimos en el inicio de las campañas están caldeados. Los representantes de la coalición Sigamos Haciendo Historia, que integran Morena, Partido del Trabajo y el Partido Verde Ecologista de México, y es abanderada por Claudia Sheinbaum, y sus contrapartes de la alianza Fuerza y Corazón por México, que encabeza Xóchitl Gálvez, y los de Movimiento Ciudadano, de Jorge Álvarez Maynez, cruzan acusaciones, se mofan de sus propuestas, cuestionan cuánta gente llevaron a tal o cual evento, mientras que los mexicanos están observando la batalla campal en los medios y redes sociales.
Los candidatos recorren las principales ciudades del país y aquellas que tienen un significado en su mensaje, como Xóchitl en Fresnillo, Zacatecas, la ciudad con mayor percepción de inseguridad, o Sheinbaum que se cobijó con el Zócalo de la Ciudad de México lleno, y Álvarez Máynez acudió a Lagos de Moreno, Jalisco, estado que es uno de los enclaves de MC.
Y mientras todo esto pasa, al Presidente Andrés Manuel López Obrador se le cuecen las habas ante la prohibición de que hable del proceso electoral. Total, andar en campaña es lo mejor que sabe hacer, aunque el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ya determinó que el Primer Mandatario vulneró la equidad electoral con un discurso de junio de 2023 sobre el quinto aniversario de su triunfo en 2018. Hasta ahora no ha vuelto a hablar de la elección presidencial, a ver si aguanta, porque resulta que la Ley sí es la Ley.