Difícil superar la ocurrencia de rifar el avión presidencial a través de la moribunda Lotería Nacional; y qué, quien lo gane dónde lo va a guardar, y para qué lo va ocupar; para ir a trabajar, a Acapulco o a dónde?, y con qué va a pagar su mantenimiento el ciudadano de a pie agraciado? Muy grave cuando un gobierno juega con la inteligencia del pueblo.
Empleo para migrantes centroamericanos que no logren pasar a los EU, y mientras que a los mexicanos se los lleva el tren; la salud el gran pendiente. El Insabi no es lo que se esperaba; ante eso, con la altura que lo distingue, el gobernador mexiquense dijo la víspera que apoya este programa federal, no obstante, pidió que se aclaren a la brevedad, las reglas de operación para que realmente pueda traer los beneficios que la ciudadanía demanda.
De acuerdo con expertos como el doctor Julio Frenk, el Isabi lleva a México a un retroceso de más de 40 años en materia de salud. En el Estado de México se hace lo posible para “cobijar” a la población, particularmente en regiones con graves carencias en ese rubro, como el sur de la entidad, donde la víspera el gobernador Del Mazo entregó ambulancias a municipios donde no tienen ni eso, para muestra Tejupilco, donde hace poco, las emergencias dejaron de atenderse durante dos meses, porque la única ambulancia de la Cruz Roja que brinda servicio en esa demarcación que es la más poblada de la región, estaba descompuesta.
Lamentable, el Seguro Popular cambia de nombre y le “brota” viruela. Julio Frenk, Salomón Chertorivski y Gabriel O´shea Cuevas, tienen el conocimiento de la realidad en ese delicado tema, así como de los 80 mil millones de pesos del fondo destinado para ese programa durante los últimos años.
En el Estado de México las cosas no están para hacer bromas, aunado a la austeridad que golpea los servicios de salud, imperan las imposiciones de los funcionarios del GEM, con o sin la anuencia del Jefe del Ejecutivo Estatal; “acuerdos” de la LX Legislatura local, que perjudican a los mexiquenses; leyes con penalidades considerables por faltas administrativas, absurdas condenas penales por delitos de lesa sociedad; infames medidas para “garantizar” la seguridad, que incluye “el alquiler” de patrullas, que en algunos casos solo fueron adquiridas para aparentar, porque la delincuencia continúa dándose vuelo en sitios como la capital mexiquense, donde para variar se incendió la víspera el emblemático Molino de Piedra, ícono de Toluca. En otros municipios altamente poblados la situación es la misma, muchas patrullas nuevas con cientos de uniformados que de poco sirven para inhibir delitos como el robo violento.
Parece que los presidentes municipales en turno en los 125 ayuntamientos del Estado de México, se pusieron de acuerdo para “conceder” impunidad total a los presuntos responsables de latrocinios ocurridos en administraciones pasadas. El saqueo a todos los niveles; 26 mil millones de pesos “volando”; más 43 mil millones de pesos de deuda y lo que se acumule el 2020.
Pésimo antecedente: el nieto de Amlo, nació en los Estados Unidos... y en este reino de la violencia, la impunidad y la corrupción, que se debe erradicar de “arriba para abajo”, es imperante que el gobierno federal y estatal empiecen el año con el pie de derecho y se ocupen de los temas importantes e impostergables, no sólo en el ámbito de salud, sino en todos donde no se ven avances; la cifra de pobres continúa a la alza y la promesa de pacificar al país sigue siendo sólo eso. A estas alturas la ciudadanía se siente estafada.