Política

Peor que ómicron

  • En Corto
  • Peor que ómicron
  • Alejandro Maldonado

Acá en los Estados Unidos, desde donde escribo esta colaboración, hay dos variantes de coronavirus predominantes: ómicron y delta. La segunda se identificó por primera vez en la India en diciembre del 2020, y puede causar casos más graves que otras variantes.

Pero el caso de ómicron es peculiar porque, aunque se identificó por primera vez apenas en noviembre del 2021 en Sudáfrica, se extendió con una velocidad inaudita al resto del mundo. La variante representa ya 95% de los casos de coronavirus en Estados Unidos. La “buena noticia”, según los modelos predictivos, es que ómicron podría estar llegando a su pico en diversos países ya que se está quedando sin personas a quiénes infectar.

Ahora concédeme imaginar “algunas semejanzas” entre el coronavirus y el pecado. Para empezar, muchos consideran que el pecado no existe, y que se reduce a un asunto sociológico y cultural. También habría “variantes del pecado” que se extienden “más rápidamente que otras”, y que tienen “un menor peligro potencial”. Por ejemplo, mentir o tener malos pensamientos, -algo que podemos hacer con frecuencia-, “no tendría el mismo impacto” que robar o matar. De igual manera podemos considerar que el pecado ha infectado a todo ser humano pues inició aproximadamente hace 6 mil años con Adán y Eva en el huerto del Edén, y no ha desaparecido. Por ultimo, el pecado es algo a lo que no queremos darle mucha importancia, hasta que sus consecuencias afectan seriamente nuestras vidas, y a veces ni así.

Lo cierto es que el pecado -cualquiera que sea- es peor que el más agresivo de los covid, pues nos separa de Dios aquí y por la eternidad. “Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios”, Romanos 3.23.

Sin embargo, Dios nos ofrece el remedio. Él ha provisto una sola y definitiva cura a través de Jesucristo. “Y en ningún otro hay salvación”, Hechos 4.11. Dios nos ama de tal manera que envió a su único hijo en nuestro rescate. “Y Él es la propiciación por nuestros pecados, y los de todo el mundo”, 1ª. Juan 2.2.

Dios no ignora tu condición, ni es indiferente a lo que te pasa. Jesús quiere salvarte. Él triunfó sobre la tentación, el pecado, Satanás y la muerte. Decide creer en Jesús; pídele que te perdone y que venga a morar a tu corazón, y te dará nueva vida.

Alejandro Maldonado


Google news logo
Síguenos en
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.