Escribo desde Dallas Texas, y he tenido la oportunidad de ver de cerca dos temas esenciales: Salud, y educación. Empezando con el primero. Acá si una persona no cuenta con seguro de gastos médicos, (cuesta alrededor de 500 dólares mensuales para un adulto), sus posibilidades de acceso a la salud son escazas. La visita a un médico general, cuesta por lo menos 100 dólares. Usualmente, y para evitar demandas, si el doctor no quiere correr riesgos, envía al paciente con el especialista, que cobra por lo menos 150 dólares. Éste último, también para protegerse, puede optar por indicar una batería de estudios que con facilidad superan los mil dólares. (Tan solo un estudio radiográfico supera los mil dólares). Si se trata de acudir a emergencias de un hospital, la visita por unas horas, no será menor a los tres mil dólares. El nacimiento de un bebé, cuesta al menos 5 mil dólares, y no existe la vacunación universal gratuita. Claro que la población de bajos recursos puede inscribirse a un programa gubernamental llamado "Medicaid", pero este también tiene sus limitaciones.
En el caso de la educación, solo es "gratuita" hasta el bachillerato, y su calidad está en función de lo que se conoce como "distritos escolares". Las mejores escuelas públicas se localizan en las zonas a donde vive gente de dinero, y esto tiene que ver con el pago de impuestos. En el caso de las "universidades públicas", el costo supera los 30 mil pesos mensuales. Por eso los egresados salen con deudas millonarias.
En México contamos con amplios programas de salud y educación gratuitos, que ciertamente deben ser continuamente revisados y perfeccionados. Por eso es relevante lo que ha venido diciendo el Gobernador Alfredo del Mazo: Que para diciembre habrá abasto de 80% de suministros y medicamentos en hospitales de la entidad; y que la meta es llegar a la brevedad al 100%. Por eso es de reconocer el que el titular del ISEM, el Dr. Gabriel O´Shea, se anime a realizar un recorte de personal no sustantivo en áreas administrativas, para fortalecer mejor el área médica. Por eso es importante que se fortalezca financieramente a la UAEM, y se atiendan las peticiones de su rector, Alfredo Barrera, a fin de que la máxima casa de estudios, siga siendo una de las mejores del país y de Latinoamérica.