El domingo, el presidente Andrés Manuel López Obrador informó que se contagió de covid-19. Ayer, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, dijo que el mandatario contaba con el esquema nacional de vacunación completo, con tres o cuatro dosis de la vacuna.
Se trata de un esquema de vacunación incompleto comparado con otros países como Estados Unidos, donde no solo llevan tres o cuatro dosis de la vacuna contra covid, sino que desde septiembre de 2022 se aplica un refuerzo bivalente, con eficacia contra el virus original y sus primeras variantes.
México se ha negado a comprar esas dosis disponibles en marcas como Pfizer y Moderna, y, por el contrario, ha seguido aplicando dosis diseñadas para combatir solo al virus original.
Como el Presidente, la mayoría de los adultos mayores que se vacunaron en México cuentan con tres dosis. Sin embargo, o ya pasó un año o está por cumplirse el año de su última aplicación. Por lo que se les debería estar convocando para un refuerzo anual.
Pero esto no se ha promovido. La culpa es de Hugo López-Gatell, que considera que las farmacéuticas están haciendo negocio con la “obsolescencia programada” de las vacunas. Olvida o no quiere reconocer que en otros casos, como el de la influenza, se aplica una dosis actualizada cada año.
Las cartillas de vacunación contra covid-19 de los adultos mayores, como el Presidente, que viven en Ciudad de México tienen los siguientes apartados: primera dosis, segunda dosis, refuerzo y segundo refuerzo. ¿Contará el Presidente con ese segundo refuerzo, del que el secretario de Gobernación no tenía certeza?
Para quien desee aplicarse un refuerzo en México, actualmente solo está disponible la vacuna cubana Abdala, aprobada por Cofepris para uso de emergencia, pero no es reconocida por la Organización Mundial de la Salud, lo que ha motivado desconfianza entre la población para aplicársela. Desde el 21 de diciembre de 2022 y hasta marzo pasado en la capital del país se la habían puesto 206 mil personas.
Como es sabido, la vacuna no garantiza inmunidad, pero como lo describe la Secretaría de Salud capitalina, “la importancia de contar con esquemas completos de vacunación es evitar casos graves y hospitalización por esta enfermedad”.
El nuevo contagio del Presidente es ad hoc para ignorar a Hugo López-Gatell y comprar vacunas bivalentes para reforzar a la población contra covid-19.