Este 11 de agosto de 2025, Colombia despertó con una noticia que sacudió al país: Miguel Uribe Turbay, uno de los precandidatos presidenciales favoritos para las elecciones de 2026, falleció a dos meses de haber sido atacado en un mitin político.
La muerte del senador colombiano, más allá de ser un hecho trascendental por el hecho en sí, ha provocado una ola de múltiples reacciones en todo el espectro político y social del país por cómo terminó hospitalizado y luchando por su vida por poco más de 60 días.
Los hechos ocurrieron el pasado 7 de junio. Mientras Uribe Turbay pronunciaba un discurso en plena calle del barrio de Modelia, Bogotá, una persona entre el público sacó un arma de fuego y disparó directamente en la cabeza del precandidato presidencial.
El trágico acontecimiento no solo ha conmocionado al ámbito político nacional, también ha recordado intentos de asesinatos de figuras políticas importantes e incluso algunos de magnicidios más insólitos ocurridos en el continente americano, como el de John F. Kennedy: el último presidente de Estados Unidos en ser asesinado.

Un recorrido presidencial que terminó en asesinato
La presidencia de John F. Kennedy estuvo marcada por momentos clave de la Guerra Fría, discursos inspiradores y una imagen de renovación para Estados Unidos. Sin embargo, su mandato, que prometía transformación y liderazgo firme, tuvo un desenlace trágico e inesperado.
En pleno ejercicio del poder, y cuando su figura ganaba peso en el escenario internacional, su recorrido presidencial fue abruptamente interrumpido.
Los hechos ocurrieron el 22 de noviembre de 1963. Kennedy, de 46 años de edad, había viajado a Dallas en compañía de su esposa, Jacqueline, como parte de una gira política por Texas destinada a reforzar su imagen de cara a las elecciones de 1964.
Tras descender del avión, los Kennedy abordaron una limusina Lincoln X-100 en compañía del entonces gobernador John B. Connally y su esposa.

A pesar de que Texas ha sido tradicionalmente un bastión republicano, cientos de personas se reunieron aquel día en las calles para dar recibimiento al demócrata, por lo que el vehículo presidencial recorrió el centro de la ciudad en medio de una multitud que lo aclamaba.
El destino final del recorrido había sido elegido previamente. En el momento del atentando, John F. Kennedy y su comitiva se dirigían al Trade Mart de Dallas, donde el presidente tenía programado dar un discurso ante líderes empresariales y políticos locales. Pero nunca se concretó.
Tres disparos
Alrededor de las 12:30 horas, cuando el vehículo de los Kennedy ya daba la espalda al edificio Texas School Book Depository, un primer disparo impactó en la parte superior de la espalda del presidente, saliendo por su garganta.
Instantes después, mientras la esposa del mandatario de Estados Unidos se percataba de lo ocurrido, un segundo disparo hirió al gobernador de Texas, quien viajaba en el asiento delantero. Un tercer y devastador balazo alcanzó la cabeza de Kennedy, provocándole una herida mortal frente a los ojos atónitos de su esposa y de cientos de testigos.
El caos se apoderó del lugar. Fotografías de aquella época recuerdan el momento en el que la limusina aceleró en dirección al Hospital Parkland Memorial, en donde Kennedy fue declarado muerto a las 13:00 horas.
La escena quedó grabada en la historia como uno de los episodios más impactantes del siglo XX.

Los hallazgos y la detención del responsable
En los primeros minutos de la crisis que rápidamente se convirtió en nacional, y mientras el vicepresidente Lyndon B. Johnson asumía la presidencia de Estados Unidos abordo del Air Force One que regresaba el cuerpo sin vida de Kennedy a Washington, las autoridades texanas realizaron los primeros hallazgos.
El archivo histórico de JFK refiere que, 45 minutos después del asesinato, fuerzas del orden de Dallas descubrieron tres casquillos gastados "en la esquina sureste de la sexta planta del Texas School Book Depository".
Casi al mismo tiempo, el policía J.D. Tippit era asesinado por la persona que más tarde sería identificada como el autor material del homicidio de Kennedy: Lee Harvey Oswald. El hombre fue detenido y acusado de ambos asesinatos, aunque negó rotundamente su implicación.

Dos días después, cuando era trasladado desde la cárcel de la ciudad al condado, Oswald fue asesinado a plena luz del día y ante cámaras de televisión por Jack Ruby, un dueño de club nocturno. Su muerte impidió que enfrentara un juicio y alimentó aún más las sospechas de conspiración y encubrimiento.
Este giro dramático dejó al país con más preguntas que respuestas, y marcó el inicio de décadas de teorías, investigaciones oficiales e independientes que intentaron, sin éxito total, esclarecer la verdad detrás del magnicidio.
Las conclusiones del asesinato de John F. Kennedy
Tras el magnicidio que conmocionó a Estados Unidos y al mundo entero, el gobierno estadunidense puso en marcha una investigación oficial para esclarecer los hechos.
El 29 de noviembre de 1963, apenas una semana después del atentado, el presidente Lyndon B. Johnson estableció la Comisión Warren, encabezada por el presidente de la Corte Suprema, Earl Warren, con el mandato de investigar el asesinato.
La Comisión Warren publicó su informe en septiembre de 1964, concluyendo que Lee Harvey Oswald actuó solo y que no existía evidencia concluyente de una conspiración dentro o fuera del gobierno de Estados Unidos.
Sin embargo, en 1979, un tercio del Comité Selecto de la Cámara de Representantes de Estados Unidos sobre Asesinatos concluyó que Kennedy probablemente fue asesinado como resultado de una conspiración".
Kennedy fue enterrado en el Cementerio Nacional de Arlington, Virginia.
¿Qué hay de John F. Kennedy?
John Fitzgerald Kennedy nació el 29 de mayo de 1917 en Brookline, Massachusetts, en el seno de una influyente familia estadunidense.
Hijo de Joseph P. Kennedy, un destacado empresario y diplomático, y Rose Fitzgerald, proveniente de una familia política, creció en un ambiente marcado por el servicio público y la ambición.
Desde joven, mostró interés por la política y el servicio militar, sirviendo durante la Segunda Guerra Mundial en la Marina de los Estados Unidos.

Más tarde, comenzó su carrera política como congresista y senador por Massachusetts, hasta convertirse en el 35º presidente de Estados Unidos en 1961, a los 43 años, convirtiéndose en el mandatario más joven en ser elegido y el primero católico en ocupar el cargo.
El 18 de marzo de 2025, la administración de Estados Unidos, encabezada por Donald Trump, publicó nuevos archivos relacionados al asesinato presidencial de Kennedy. Sin embargo, expertos refieren que no hay información nueva y que gran parte de los documentos continúan clasificados.
Algunas de las teorías
Aunque la Comisión Warren concluyó que Lee Harvey Oswald actuó solo, muchos investigadores, periodistas y ciudadanos creen que hubo una conspiración detrás del magnicidio.
Por ejemplo, algunos sostienen que sectores dentro del propio gobierno estadunidense, como la CIA o el FBI, habrían tenido motivos para eliminar a Kennedy por sus posturas sobre la Guerra Fría, Cuba o la supuesta intención de reducir el poder de las agencias de inteligencia.
Una de las teorías más populares es que no fue Oswald el único tirador. Testigos afirmaron haber escuchado disparos desde distintas direcciones, lo que ha alimentado la hipótesis de un segundo francotirador.
Más allá de quién disparó, muchos creen que hubo un encubrimiento posterior para proteger a los verdaderos responsables o evitar una crisis institucional.
En la próxima entrega, MILENIO abordará dos de los atentados más recientes en la historia internacional: el intento de asesinato a Cristina Fernández de Kirchner y Donald Trump.
RMV.