Los empleados de S&F Foods se pasaban el día levantando cajas de cartón pesadas de una cinta transportadora y colocándolas en palés para su envío. Así que Mike Calleja, director de planta de la empresa, que fabrica comida congelada para comedores escolares, contrató a un robot.
Comprar un robot podía costar hasta 500 mil dólares, y Calleja ni siquiera estaba seguro de que funcionaría. En su lugar, alquiló un robot a Formic, una empresa de Woodridge, Illinois, que se encarga de la instalación, formación, programación y reparaciones. Cuesta unos 23 dólares la hora, más o menos lo mismo que un humano.
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Buscaba facilitar el trabajo humano
"Tenemos muy poca rotación porque intentamos facilitar el trabajo —explicó Calleja sobre la empresa, que está a las afueras de Detroit—. Somos una instalación pequeña, pero producimos unos 30 mil kilos de comida al día". Apilar era "un trabajo agotador”.
En una época en la que los fabricantes enumeran sistemáticamente la atracción y retención de trabajadores como uno de sus principales retos, las empresas están automatizando algunos de los peores trabajos de sus plantas como estrategia de retención de trabajadores.
De los aproximadamente 244 mil fabricantes que hay en Estados Unidos, cerca de 93% tienen menos de 100 trabajadores y 75% menos de 20, según la Manufacturing Extension Partnership.
Esas pequeñas y medianas empresas carecen a menudo de capital o conocimientos internos para integrar nuevos equipos en sus cadenas de montaje.
"Ahí es donde está la oportunidad", aseguró Saman Farid, director general de Formic, que alquila robots a unas 150 fábricas diferentes de todo el país.
Los clientes de Formic van desde fabricantes de comida para perros hasta de piezas de automóviles.
Muchas son pequeñas empresas familiares que tienen que rechazar pedidos por falta de personal; automatizar los trabajos más arduos y repetitivos les permite reorientar a los empleados hacia tareas más productivas, manteniéndolos satisfechos y aumentando las ventas.
Algunas fábricas afirman tener tasas de rotación de 100% en determinados trabajos, dijo Farid, lo que obliga a los directivos a contratar, formar y someter a pruebas de drogas constantemente a empleados nuevos.
"Cuando adoptan robots para hacer algunas de las tareas más aburridas, sucias, peligrosas, repetitivas y agotadoras, la gente se queda, ¿verdad? Porque no están levantando cajas pesadas 12 horas al día", afirmó.
Las empresas de alquiler de robots están especializadas en ciertas tareas habituales (apilar cajas, clasificar piezas, soldar o introducir material en máquinas), a menudo los mismos trabajos que causan lesiones por flexión, levantamiento y torsión en los seres humanos.
Formic fue una de las al menos tres empresas de alquiler de robots creadas en 2020, cuando la pandemia creó una aguda escasez de mano de obra. AAA20 Group, una empresa de Las Vegas, alquila robots llamados paletizadores que apilan cajas en palés y las envuelven en plástico por unos 4 mil 950 dólares al mes.
¿Qué se sabe de la empresa que alquiló el robot?
RobCo, una empresa alemana de alquiler de robots, también se fundó en 2020. En enero, que adquirió los activos de Rapid Robotics, una empresa estadunidense que estaba cerrando, para introducirse en el mercado estadunidense.
La empresa abrirá una oficina en San Francisco el mes que viene. También está equipando unas instalaciones de fabricación en Austin, Texas, para fabricar robots de alquiler, según Lorenzo Pautasso, director general.
Dijo que los clientes de la empresa en Estados Unidos suelen estar motivados por el deseo de disminuir la exposición de los empleados a toxinas nocivas, o a otras tareas que ponen en peligro la salud.
"No se trata de reducir el costo de la mano de obra —compartió Pautasso—. Se trata de garantizar la consistencia de la mano de obra, que las personas que están hoy estarán mañana".
Expansión de empresas
Matt Kunach, director de operaciones y copropietario de MattPak, fabricante por contrato de pastillas de detergente para lavadoras y lavavajillas en Franklin Park, Illinois, dijo que alquilar tres paletizadores a Formic ahorra algo de dinero, pero que la razón principal del cambio era reducir el riesgo de lesiones de los empleados.
Todos los trabajadores que apilaban cajas en palés se reasignaron a diferentes puestos de trabajo en la planta, confirmó, lo que ha abierto la capacidad de expansión a nuevas líneas de productos. Algunos han sido ascendidos a operarios de máquinas y jefes de línea, puestos que conllevan más prestigio y un salario más alto, aseguró.
El alquiler de robots constituye una pequeña, pero creciente porción del mercado global, según la Federación Internacional de Robótica, un grupo sin fines de lucro que publica una encuesta anual sobre los fabricantes de robots de todo el mundo.
En 2023 se vendieron en todo el mundo unos 113 mil robots de transporte y logística, 35% más que el año anterior. Unos 5 mil estaban disponibles para alquilar, un aumento de 20 por ciento.
Este modelo también se ha puesto de moda en Silicon Valley, donde algunos inversionistas lo encuentran atractivo debido a los ingresos recurrentes y al enfoque en la creación de relaciones a largo plazo que crean hábitos, en lugar de en ventas puntuales, según un informe publicado por el Silicon Valley Bank el año pasado.
Las empresas que usan el modelo "consiguen más capital y a mejores valoraciones" que las que no lo usan, señalaba.
Sankaet Pathak, fundador de la desaparecida empresa de tecnología financiera Synapse Financial Technologies, ha recaudado más de 11 millones de dólares para su nueva empresa, Foundation, que pretende construir y alquilar una flota de robots humanoides.
Dijo que Foundation tiene robots desplegados en una fábrica de autos de Georgia, donde clasifican piezas en una cinta transportadora. Los humanoides de dedos rígidos son todavía un trabajo en curso, pero han llegado tan lejos que cobra 33 mil dólares por turno.
Actualmente, trabajan en un solo turno, y espera que con el tiempo trabajen las 24 horas del día. Por el momento, los trabajadores de la fábrica ven a sus robots humanoides como una novedad más que como una amenaza.
"Sería más polémico si los robots empezaran a ocupar puestos de trabajo que a la gente le gusta hacer", dijo Pathak.
La reactivación de la base industrial estadunidense requiere la adopción generalizada de robots que parezcan personas, afirmó, ya que la mayoría de las cadenas de montaje de las fábricas se construyeron para humanos.
Pero Farid, que pasó años en fábricas de China, dijo que el objetivo de un robot es que haga cosas que los humanos no pueden, y que no debe limitarse a la forma humana.
Por ejemplo, el brazo robótico de la fábrica S&F tiene una aspiradora en lugar de una mano que recoge cajas de la parte superior y las coloca en un palé con mucha más eficacia de lo que podría hacerlo un humano.
¿Cuáles son las desventajas?
La compra directa de robots se ha vuelto más asequible desde la última ley política y presupuestaria aprobada este verano en Washington. Incluye una disposición que permite a las empresas deducir el costo total de los nuevos equipos el año en que se ponen en servicio, según Kevin Harris, socio de EisnerAmper, empresa que asesora a las empresas sobre contabilidad y legislación fiscal.
Pero algunas empresas aún no pueden permitirse los robots, o prefieren mantener el costo como un gasto de explotación, según Andra Keay, directora gerente de Silicon Valley Robotics, una asociación del sector que apoya la comercialización de la tecnología robótica.
Otros simplemente no están preparados para comprometerse a una gran compra en un momento en que la tecnología evoluciona tan rápidamente o quieren probar soluciones antes de invertir.
"Es una gran idea para empezar —expresó Keay—. Los robots son necesarios para hacer frente a la escasez de mano de obra y eso incluye hacer los trabajos más agradables y placenteros".
RM
