Un total de 214 reos de alta peligrosidad en Chihuahua y Ciudad Juárez fueron trasladados a prisiones federales durante la madrugada, en un operativo en el que participaron más de mil elementos de seguridad.
Familiares de los internos, incendiaron vehículos en las inmediaciones del Centro de Readaptación Social número 2, de Aquiles Serdán en la ciudad de Chihuahua, al enterarse de su traslado.
En el operativo se contabilizaron 117 internos del Cereso de Aquiles Serdán, 82 personas del Cereso de Juárez, así como diez personas de baja peligrosidad del Cereso 2 en la ciudad de Chihuahua.
“Estos individuos representan un riesgo significativo y, por lo tanto, serán trasladados a instalaciones federales donde se pueden manejar de manera más segura”, dijo el secretario de Seguridad Pública estatal, Gilberto Loya, en conferencia de prensa.
Los presos se encuentran sentenciados por delitos como portación de armas de fuego, homicidio, desaparición forzada, fraude, delitos contra la salud, posesión de armamento y cartuchos, robo agravado y evasión de la justicia por hechos ocurridos desde el 1 enero del 2023.
Los reclusorios a los que fueron trasladados son: el Altiplano; el Cefereso 8 en el Norponiente de Sinaloa: el Cefereso 11 en Sonora; el Cefereso 12 en Guanajuato; el Cefereso 14 en Durango; y el Cefereso 17 en Michoacán.
El operativo de traslado fue un esfuerzo conjunto que contó con la participación de mil elementos de la Policía Estatal, la Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Se espera que este traslado tenga un impacto positivo en la seguridad tanto dentro como fuera de las prisiones, al reducir la sobrepoblación en las cárceles locales y al asegurar que los reos de alta peligrosidad estén bajo la supervisión adecuada en las prisiones federales.
AAEG
