Setenta años de matrimonio se dice fácil, pero, para vivirlos, se requiere fortaleza y flexibilidad a la vez. En el ejido Mayran, municipio de San Pedro, Coahuila, la familia Altamirano Treviño festejó las Bodas de Titanio de sus pilares de vida, don Porfirio Altamirano y doña María Guadalupe Treviño.
Las Bodas de Titanio representan 70 años de matrimonio, y simbolizan la fortaleza y durabilidad de la relación matrimonial, además, es la reflexión sobre su largo camino juntos.
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Don Pilo y doña Lupita, lograron la proesa y son un ejemplo y orgullo para sus siete hijas y sus dos hijos, la mayoría de ellos profesionistas. Rosario, una de sus hijas, señala que es una bendición tenerlos aún presentes y esta oportunidad de festejarlos no la iban a desaprovechar.
Doña Lupita tiene 92 años de edad, matriarca de la familia, quien con sus consejos y su fe, los llevó por el buen camino.
Don Pilo, es un icono del transporte rural, ya que por años manejó su autobús teniendo la ruta ejidal de Mayran a San Pedro, pasando por distintas comunidades donde recogía a los pobladores.
Con esa ruta ejidal, sacó adelante a sus hijas e hijos, y ahora, dice Rosario, hay que regresarles un poco de lo mucho que les dieron.
Sus Bodas de Titanio las celebraron el sábado 19 de julio, y a temprana hora fue la misa para reafirmar su matrimonio. La temática fue de Fiesta Mexicana. La familia, además de los invitados, acudió con traje mexicano. Para las dos de la tarde fue la recepción para la comida y un poco de convivencia familiar.
"Un orgullo y una bendición tener a nuestros padres presentes, pero más que nada, juntos, los cuidaremos para tenerlos más años con nosotros, y felicitarlos por sus 70 años de matrimonio", dijo Rosario.
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