A las 8:00 horas de este miércoles 26 de febrero, más de 300 elementos de la Policía Estatal de las ocho regiones de Oaxaca dejaron las armas e iniciaron un paro indefinido ante presuntas amenazas de despidos masivos.
La principal exigencia de los uniformados, tanto hombres como mujeres, es que el gobierno estatal de Salomón Jara Cruz y los mandos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) vuelvan a aplicar los exámenes de control y confianza.
Asimismo, demandan la renuncia de Iván García Álvarez, secretario de Seguridad Pública; Karina Barón, secretaria ejecutiva del Sistema Nacional de Seguridad Pública; Ariana Hernández Ortiz, subdirectora de Seguridad Institucional; Plácido Jarquín, comisionado de la Policía Estatal; Amado Jiménez Osorio, jefe del Estado Mayor; Dionisio Ruiz López, jefe del despliegue operativo, y Berenice Bonilla, titular del Departamento Jurídico.
Hasta el momento, los agentes bajaron la pluma de ingreso en las instalaciones del cuartel ubicado en San Bartolo Coyotepec, impidiendo la salida de las patrullas de los elementos que sí deseaban trabajar.
Minutos después, llegó la licenciada Karina Barón Ortiz, titular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, a quien le entregaron un pliego de demandas que incluye la mejora de los uniformes, la adquisición de nuevos chalecos antibalas y el pago oportuno de viáticos y bonos.
MO
