La cumbia lagunera se fusiona en el aire con el olor a pescado. Algunos pájaros gorjean dentro de las jaulas mientras las Coca Colas en envase de vidrio se colocan en las mesas de las fondas. Los gritos de los vendedores de verduras y de las cocineras tradicionales en el Mercado Juárez amortiguan el eco de los locales vacíos.
Entre los pasillos se mira deambular a algunos turistas junto a indigentes y señoras que compran las tortillas para la comida, en tanto algunas mujeres policías observan las artesanías.

Los negocios por décadas han sido familiares, pero los relevos generacionales están a un paso de soltar la toalla porque aún estando en el corazón de Torreón, aseguran, necesitan publicidad y que los políticos que llegan en campaña, regresen con una propuesta para que este espacio se sostenga.
Armando Romero Mendiola lleva cinco años a cargo del local que heredó de su madre. Su familia ha sido de comerciantes, por eso sabe que un crecimiento exponencial de su negocio no ha existido.
En un quinquenio en donde le tocó sortear incluso una pandemia, pudo resistir. Pero la inflación devora sus ganancias en tanto que la gentrificación de la zona Centro ha desaparecido del paisaje interior del mercado a casi todas las carnicerías. Los propietarios no pudieron competir con los supermercados.
“Un crecimiento no ha habido, sinceramente en estos cinco años sí ha habido un pequeño avance pero no significativo. Obviamente ha aumentado todo pero el alcance es prácticamente el mismo. En mi negocio soy yo nada más pero todos tienen sus negocios en la fa milia; mi papá tiene sus locales, mi hermano y mi mamá igual. Yo tengo dos locales y para seguir con la tradición vendo los recuerdos y artesanías”.
Las pacas de algodón, torreoncitos de madera y el Cristo de las Noas son los recuerdos que los turistas adquieren en su paso por la ciudad. Algunos se generan en la región pero también tiene proveedores de Ciudad de México, Moroleón, Guadalajara, Saltillo, Zacatecas y Monterrey. Así por temporadas viaja para buscar mercancías para alcanzar sus metas, e incluso dijo, ahora tiene sus redes sociales y atender ventas por internet.
“Desgraciadamente este 2025 empezó muy flojo en comparación con el 2024 y 2023 y todavía el 2022 porque el que estuvo de a tiro muy feo fue el 2020, para el 2021 notamos considerablemente el cambio porque venimos de no vender nada a empezar a vender y fue donde se notó. Cada año tratamos de ver un crecimiento de a lo mejor un 5 por ciento, y a lo que va del año no se ve”.
Armando dijo que para las ventas de artesanías de Torreón, las fechas claves son la Semana Santa, vacaciones de verano y las vacaciones decembrinas cuando regresan los paisanos. A ello se suma conmemoraciones como el 10 de mayo, cuando se hace una fiesta y se ofrece un recuerdo.
“Yo creo que la policía aquí sí está bien porque ha habido una ola de robos en el mercado desde el año pasado. Pero lo que pediríamos al municipio, al menos en mi experiencia, yo creo que al mercado sí le hace falta publicidad. El gobierno ya dejó morir al mercado y pues que nos rasquemos por nuestra propia cuenta. Obviamente estamos en un tiempo donde la tecnología, si no nos subimos nos quedamos atrás. El mercado está estancado, por eso pediría el apoyo en cuanto a publicidad porque hay muchos mercados cerrados, porque como ya no somos mercado de abasto, mucha gente no sabe que estamos aquí y que hay sangre joven que luchamos por estar aquí”, concluyó.
cale