Fernando Menéndez, presidente de la Zona Norte de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), afirmó que en la Comarca Lagunera no hay transportista que no haya sido víctima de extorsión.
Durante su intervención, explicó que los empresarios de la región señalan a un sindicato como responsable de estos actos, aunque evitó precisar cuál, ya que así lo refieren en los comunicados emitidos por los propios afectados.

“La situación específica de La Laguna... lo que se está haciendo es empezar a exigir, no nada más a nivel estatal; los organismos empresariales quieren pronunciarse a nivel federal, que haya un apoyo y una respuesta conjunta. Tenemos conocimiento de que, a nivel estatal, hay una estrategia con el Gobierno Federal para combatir este delito, y como Coparmex, liderando y con el apoyo de Coparmex Nacional, hacer incidencia para que esta estrategia se ponga en marcha”.
Menéndez advirtió que las denuncias por extorsión son mínimas en comparación con la magnitud del problema. En el caso de Durango, indicó que apenas se tienen registradas nueve denuncias formales.
“El grave problema que tenemos es que tenemos una idea de lo grave que es porque lo vemos, lo vivimos, lo platica la gente del sector pecuario, donde tenemos más incidencias. Sin embargo, mandé un mensaje para que me rectificaran la cifra, pero es alarmante. Creo que en esa parte de extorsión, en el estado de Durango, hay apenas nueve denuncias interpuestas”.
A pesar de ello, reconoció que el número real de extorsiones es mucho mayor.
Por su parte, Juan José Sierra, presidente nacional de Coparmex, señaló que el delito de extorsión ha aumentado un 16 por ciento durante el año, y subrayó que existe una "cifra negra" considerable, es decir, casos que no se denuncian.
Sierra propuso que se endurezcan las penas para quienes cometan este tipo de delitos, además de que los estados deben tipificar correctamente la extorsión en sus respectivos códigos penales.
También advirtió que, en algunos casos, los gobiernos estatales y municipales aplican normativas confusas que terminan por convertirse en formas de presión indebida hacia los empresarios.
“Se tienen que homologar estos impuestos ambientales. No ha sido claro y no ha sido homologado en todos los estados, y a raíz de este tipo de impuestos ambientales se da este tipo de extorsión”, señaló.
edaa