El abogado de los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa, Vidulfo Rosales Sierra, sostuvo que la información que tiene el Ejército respecto a las organizaciones sociales de Guerrero están manipulados con la intención de criminalizar a dirigentes y defensores de los derechos humanos, situación que resulta grave.
Rosales Sierra manifestó que el hackeo a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) genera datos que son muy preocupantes, como el hecho de que se haga alusión con las siglas distorsionadas del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la Parota (Cecop).
De acuerdo con los documentos dados a conocer por Guacamaya, el Cecop es una organización delictiva que se dedica a acciones fuera de la ley, como la extorsión y el secuestro, cuando en realidad es una organización campesina, que lo que impulsa es una lucha por la defensa de los recursos naturales de su ejido.
“En los documentos obtenidos se habla de situaciones que se encuentran muy apartadas de la realidad, tienen información falsa y no sustentada, pero a partir de ahí se realizan señalamientos que son muy delicados”, asegura.
“Es muy grave que el Ejército exhiba su debilidad en términos de inteligencia, nos coloca a muchos en sumo riesgo y vulnerabilidad”, sostuvo.
El representante legal de las madres y padres de los 43 estudiantes desaparecidos la noche del 26 de septiembre de 2014, asegura que los reportes de la Sedena están marcados con tendencias políticas e ideológicas.
Reconoció que algunas personas de la región y del estado, seguramente proporcionan datos a la milicia, pero advierte que esos datos están ideologizados y son facciosos.
“Tenemos un Ejército que toma posición política e ideológica, eso es muy grave, porque entonces a las organizaciones sociales las hacen ver como si representaran mayor peligro que los grupos que causan muerte y generan destrucción”, anotó.
ledz
