El Ayuntamiento de Gómez Palacio a través de Dirección de Servicios Públicos llevará a cabo una negociación con la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para el reconocimiento de 104 millones de pesos por ahorros no reconocidos y cobros indebidos aplicados del 2007 a la fecha en contra del patrimonio municipal.
Leopoldo Jiménez Mercado, titular de esta dependencia sostuvo que desde hace tres meses se llevó a cabo un censo entre un contratista enviado por esta empresa gubernamental y personal de Servicios Públicos en donde se revisó lámpara por lámpara, y se corroboró que no todas las lámparas tipo led estaban siendo contabilizadas en el ahorro de energía y en otros se aplicaban cobros duplicados.
Por ello, dijo que se aprovecha la relación que mantiene la alcaldesa Marina Vitela Rodríguez con la titular de la Secretaría de Energía, Rocío Nahle para que intervenga ante CFE y se pueda llegar a un arreglo satisfactorio de este adeudo acumulado a favor del ayuntamiento.
Como ejemplo, citó que de acuerdo a las facturas de cobro por servicio de energía eléctrica, aparecía todavía el circuito del monumento al Acueducto por el bulevar Miguel Alemán, cuando este fue retirado desde 2007 cuando se modernizó esa vialidad con pasos elevados, facturación indebida que se mantuvo hasta el 2016, pero que aparece como cobrado.
Explicó el funcionario que ese censo se llevó a cabo entre noviembre y diciembre del año pasado y se logró estimar un cálculo de 104 millones de pesos de ahorros y cobros duplicados no reconocidos por parte de la Comisión Federal de Electricidad, mismos que se busca negociar y que puedan retribuirse en especie en los futuros recibos de cobro al ayuntamiento.
Expresó que en las 3 mil 700 lámparas con tecnología led que ha incorporado en el medio rural desde la pasada administración, la CFE no ha reconocido el ahorro, ya que mientras que en la zona urbana con 18 mil 350 lámparas les aplica un cobro mensual de 3.5 millones de pesos, en lo rural les hace llegar una factura de 2 millones 150 mil pesos, de ahí que se procedió a este censo.
“Por eso hicimos este censo, para recalcular los cobros que nos hace Comisión, porque no en todos los circuitos tiene medidor, si hubiera medidor no habría nada que reclamar, pero en estos casos expuestos no los hay y la mayoría de los circuitos no están medidos”, dijo.
Jiménez Mercado detalló que la CFE estima el cobro en función un consumo de doce horas por día cada luminaria estén prendidas o apagadas y en el caso de las lámparas de vapor de sodio o aditivos metálicos, le agregan todavía un 25 por ciento más por el consumo que pudiera generar la balastra, por lo que se vuelve caro, de ahí que consideran que las todas luminarias que están en el medio rural las está considerando como si fueran convencionales y eso genera un dato falso y un cobro indebido.