La violencia volvió a estremecer los municipios de Apatzingán y Parácuaro con enfrentamientos armados entre grupos del crimen organizado en Michoacán, que dejaron como saldo un hombre asesinado y una adolescente herida por esquirlas.
En Apatzingán, los primeros reportes provinieron de la localidad de Chandio, donde ráfagas de armas de alto calibre despertaron a los habitantes en la madrugada.
Los tiroteos, que comenzaron cerca de la carretera Chandio–Presa del Rosario, se extendieron hasta la avenida 30 de Septiembre, en un enfrentamiento entre presuntas células de Los Blancos de Troya y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Durante los ataques, hombres armados irrumpieron en una vivienda para exigir las llaves de un vehículo a los moradores. Al resistirse, el propietario, identificado como Roberto Aguilar, de 50 años y de ocupación fletero de limón, fue asesinado en el lugar.
En el transcurso de la mañana, una adolescente de 16 años, identificada como Luisa Yuritzi, resultó herida por esquirlas cerca de la Plaza de Toros de Chandio.
Afortunadamente, las lesiones fueron leves y recibió atención de paramédicos.
Simultáneamente, en Parácuaro, se desató otro enfrentamiento entre presuntos integrantes del grupo conocido como Cártel de La Virgen y sus rivales de los Caballeros Templarios.
El conflicto inició en las inmediaciones de la comunidad de “El Aguacate” y se extendió a otras áreas de la cabecera municipal.
Por temor, los pobladores buscaron refugio en viviendas con estructuras de concreto para protegerse de las balas perdidas.
Hasta el momento, no se han confirmado víctimas en Parácuaro.
MO
