Hablar de Raiza Revelles es recorrer un universo donde el doblaje, la escritura y lo paranormal se entrelazan de una manera poco común.
Nacida en Monterrey, Nuevo León, Raiza ha construido una carrera versátil que la ha posicionado como una de las creadoras mexicanas más reconocidas en el mundo digital y, al mismo tiempo, como uno de los nuevos valores mexicanos de la literatura juvenil y el doblaje.
Un ejemplo es la cinta animada Los tipos malos 2, donde, en la versión doblada al español, Raiza prestó su voz a Tiffany Chismera, un personaje que ha significado todo un reto para la regiomontana.
“Es una aventura que me encanta y me ha hecho salir de mi zona de confort —comenta—, pues me permite convertirme en otra persona, por lo menos durante dos horas. El personaje me encanta, porque siento que tiene mucho de mí, siempre queriendo investigar y llegar al fondo de las cosas”, comentó.
Para ella, la experiencia no solo significó probar su talento al público, sino confirmar que su pasión por el doblaje podía llevarla a proyectos mucho más grandes de los que imaginaba cuando comenzó en redes sociales hace 12 años.

Desde muy joven, Raiza mostró inclinación por contar historias. Esa sensibilidad derivó en dos caminos que ha sabido recorrer en paralelo: la escritura y la creación de contenido.
En el ámbito literario, se ha distinguido por abordar géneros juveniles y fantásticos, llevando a sus lectores a mundos cargados de misterio, romance y aventuras con libros como El chico de la piel de cerdo y otros relatos (2020), El reflejo de la bruja (2022) o La danza de los cisnes (2024). Su pluma refleja la misma curiosidad que caracteriza su personalidad en pantalla: un interés por lo enigmático, lo extraño y lo inexplicable.
De ahí que su verdadero trampolín a la fama llegó con el lanzamiento de su canal de YouTube, espacio que, con el paso de los años, se consolidó como un referente dentro del género paranormal en habla hispana.
En un principio, Raiza compartía temas más ligados al entretenimiento general y al lifestyle, pero pronto descubrió que lo que realmente atraía a su audiencia era su manera de narrar historias de terror, leyendas urbanas y sucesos paranormales junto a la llamada Sociedad de las pesadillas, que ella fundó.
Encuentro con la muñeca Annabelle
Su estilo, cercano y a la vez inquietante, convirtió su canal en un espacio donde lo macabro se relata con la naturalidad de una plática nocturna e íntima entre amigos, aunque su comunidad supera los 2.3 millones de suscriptores.
“Creo que la fórmula ha sido no querer engañar a nadie —respondió sin titubeos—. Todos hablan de cazafantasmas y estamos acostumbrados a ver programas con actores o efectos que nos hacen dudar de la veracidad de las historias. En mi caso, nunca construimos nada, simplemente vamos a un lugar y grabamos las cosas tal y como son. A veces pasan cosas, otras no, y la honestidad con la que hacemos las cosas es lo que atrae a nuestros seguidores”, comentó en entrevista con MILENIO.
Uno de los episodios más sonados de su trayectoria como creadora fue la visita al Queen Mary, el mítico transatlántico británico convertido en hotel y atracción turística de Long Beach, California.
Famoso por su historia de fantasmas, el Queen Mary ha sido considerado uno de los lugares más embrujados del mundo, y Raiza, con su cámara y un equipo reducido, se adentró en sus pasillos para compartir con su audiencia lo que allí se vivía.
El resultado fue un video cargado de tensión, en el que los sonidos extraños, las luces parpadeantes y la atmósfera del barco se convirtieron en protagonistas.
“Entiendo que muchos pongan en duda el tema, pero quienes estuvimos ahí pudimos sentir los cambios de temperatura y cómo el ambiente cambiaba de una zona a otra. Sin duda, podría decir que es uno de los pocos lugares donde estoy segura que ocurren cosas paranormales, pues hay trabajadores del lugar que incluso no quisieron ir con nosotros a algunas partes. Es un lugar que te impresiona y te asusta”, compartió.
Aquel episodio demostró que su proyecto iba más allá de simples narraciones: Raiza estaba dispuesta a explorar, en carne propia, los lugares donde se han gestado algunas de las historias más aterradoras de la cultura paranormal.
Esa valentía la llevó a protagonizar otro de sus momentos más comentados: una sesión privada con la muñeca Annabelle, dentro de una prisión abandonada.

Para muchos, Annabelle es solo un personaje de ficción nacido de las películas de la saga El Conjuro, pero en realidad se trata de una muñeca real, resguardada durante años por los esposos Warren, famosos investigadores de fenómenos paranormales.
Raiza tuvo acceso a un encuentro especial con esta pieza, considerada una de las más peligrosas dentro del mundo del ocultismo, y decidió documentar la experiencia vivida en el West Virginia Penitentiary.
“Para nosotros es muy importante practicar las protecciones, hacernos limpias y mantener la mente zen —comparte—. Para la grabación de Annabelle, con esa locación, específicamente compramos un dron y una cámara infrarroja que mide la temperatura para comprobar cualquier tipo de actividad. Por supuesto que uno desea que explote un foco y la mayoría de las personas esperan que se vea como una película y tal vez algún día pase, pero esa no es una visión común y realista de lo que son nuestras investigaciones”, aclaró.
Estos casos no solo la posicionaron como una narradora de lo sobrenatural, sino también como una exploradora de lo oculto, una creadora dispuesta a exponer sus propios miedos frente a miles de personas.
Su canal comenzó a crecer exponencialmente y, con ello, Raiza se consolidó como una voz autorizada para hablar de lo paranormal en internet, combinando investigación, entretenimiento y experiencias personales.
“Es algo que forma parte de mi familia. Desde muy chica, todos nos juntamos a contar historias de miedo y yo creo que por eso siempre he asociado el tema con la diversión y lo familiar —recuerda—. Creo que, de alguna manera, que me dedique a esto era algo inevitable, pues me ha intrigado siempre y, desde que compré mi primera muñeca embrujada, durante un festejo de Halloween, siento que todo encajó”.
CST