Wes Anderson regresó a la competencia del Festival de Cannes con su más reciente obra, The Phoenician Scheme (La trama fenicia), y lo hizo fiel a su estilo: con una mezcla de elegancia visual, humor excéntrico y comentarios sarcástico.
Esta vez, el blanco de sus bromas fue el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien recientemente propuso aplicar aranceles del 100 % al cine extranjero.
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Wes Anderson se burla de Donald Trump
Durante la presentación de su película en el Festival de Cannes, Wes Anderson aprovechó la ocasión para referirse con ironía a las recientes declaraciones de Donald Trump, quien ha planteado la posibilidad de imponer aranceles del 100 % al cine extranjero:
“El tema de los aranceles es interesante, nunca había oído hablar de aranceles del cien por cien. No soy experto en esa área de la economía, pero creo que significa que dice que se va a quedar con todo el dinero y luego, ¿qué obtenemos? Así que lo veo complicado. ¿Pueden retener las películas en la aduana?”, reflexionó el cineasta con tono burlón durante la rueda de prensa.
Con estas declaraciones, el cineasta no solo ridiculizó la propuesta, sino que también dejó entrever su preocupación por el creciente clima de proteccionismo que podría afectar la circulación del cine internacional en Estados Unidos.
Anderson mantuvo el buen humor mientras presentaba su nuevo filme acompañado de parte del elenco: Benicio del Toro, Mia Threapleton, Benedict Cumberbatch, Riz Ahmed, Michael Cera y Rupert Friend. Algunas grandes figuras del reparto, como Scarlett Johansson, Tom Hanks y Bryan Cranston, no estuvieron presentes.
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¿De qué trata 'The Phoenician Scheme'?
The Phoenician Scheme sigue la historia de un empresario en crisis interpretado por Del Toro que, durante un viaje para resolver problemas laborales, se reencuentra con su hija Liesl, una monja severa y fumadora de pipa, encarnada por Threapleton. La película retoma el universo visual inconfundible de Anderson, donde cada escena parece una pintura cuidadosamente compuesta.
Benicio del Toro, quien ya había trabajado anteriormente con Anderson, contó que fue parte del proceso creativo desde los primeros momentos, incluso antes de que existiera un guion.
“Lees la historia, lees el guion, hablé mucho con Wes y la mayoría de la información que hubiera debido proporcionar de mis propias ideas para el personaje, estaba ya en el texto”, explicó el actor puertorriqueño.
Para Del Toro, lo más estimulante fue la cantidad de contradicciones de su personaje, lo que abrió muchas posibilidades narrativas.
“Fue desafiante y emocionante”, dijo, aunque admitió que la verdadera magia ocurre en la sala de montaje, donde Anderson “termina la película”.
El director lo confirmó: “En cada película, tienes tus ideas de lo que la película va a ser, pero es ella la que te lleva a otro lugar, a donde quiere llegar”. En su visión, los actores son “la fuerza eléctrica” del proceso, y su labor final es simplemente “darle forma” a todo ese material.
Trabajar con Anderson implica entrar a un mundo único, algo que los actores deben aceptar y abrazar. “Tienes que llevarte a ti mismo al mundo de Wes, tienes que encontrar la forma de hacerlo”, detalló Del Toro. “Es emocionante y desafiante porque todo el mundo avanza en la misma dirección”.
Uno de los momentos más curiosos del rodaje ocurrió cuando Anderson le pidió a Del Toro que hablara, riera y fumara muy rápido, aunque las escenas se grabarían en cámara lenta.
“¿Eso no es como grabarlo y reproducirlo a velocidad normal?”, preguntó el actor. “Puede ser, no sé”, respondió Wes, generando una de esas confusiones que solo en su cine tienen perfecto sentido. “Pero no, no es lo mismo”, concluyó Del Toro.
Para él, lo esencial al trabajar con Anderson es poder “canalizar al niño que llevo dentro para que explote, y eso es único como actor”.
Por su parte, Mia Threapleton, hija de Kate Winslet, vivió su primera experiencia en el mundo Anderson como un verdadero sueño hecho realidad.
“Tenía ocho o nueve años cuando me enamoré por completo de la historia de Moonrise Kingdom”, relató la actriz, quien encontró recientemente en su diario de 2013 una lista de deseos entre los que figuraba: “trabajar alguna vez con Wes”.
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La rueda de prensa no estuvo exenta de momentos cómicos, con bromas cruzadas entre el equipo y la presencia de Bill Murray, colaborador habitual de Anderson, observando todo en pantalones cortos desde la primera fila.
También estuvo presente el coguionista y productor Roman Coppola, acompañado de su hija, quien celebraba su cumpleaños número 14. A iniciativa de Murray, todos los asistentes entonaron el “Happy Birthday” en su honor.
El humor se mantuvo incluso en las preguntas más insólitas, como cuando le preguntaron a Del Toro cómo le gustaría morir. “¿Me preguntas eso porque voy de negro?”, replicó el actor entre risas, antes de responder que solo esperaba no morir en un accidente.
En cuanto a su próximo proyecto, Wes Anderson adelantó que será “bastante oscuro” y que ya está trabajando en el guion junto a Roman Coppola y Richard Ayoade.
Con información de EFE.
