Harrison Ford se despide de uno de sus papeles más famosos con la nueva película Indiana Jones y el dial del destino, que llega a los cines este jueves 29 en México.
Ford, que a sus 80 años se vuelve a poner el sombrero del arqueólogo y aventurero experto en derribar nazis de un puñetazo, confirmó a Reuters que no volverá a participar en futuras búsquedas de reliquias cinematográficas.
"Me despido de una fabulosa oportunidad de dar alegrías a la gente", dijo Ford en una entrevista, "pero quería que esta entrega de la serie fuera la última del personaje más que cualquier otra cosa".
La película comienza con un Ford rejuvenecido por medio de la inteligencia artificial, luchando de nuevo contra los nazis para asegurarse la mitad del dial del destino del inventor griego Arquímedes.
Aunque Ford ha elogiado lo logrado de su aspecto juvenil en la película, dijo a Reuters que no cree que se vaya a producir un largometraje entero con su imagen rejuvenecida.
"No puedo imaginar que eso vaya a ocurrir", dijo.
"Creo que hay barreras para eso, tanto por cuestiones legales como porque simplemente no funcionaría", dijo. "Tienes que estar en un plató con gente que diga, ya sabes: '¿Por qué no probamos esto? Haz esto, haz aquello, haz lo otro'".
Durante el resto del metraje de El dial del destino, el mayor de los Jones intenta hacerse con la otra mitad del dial con la ayuda de su ahijada Helena (Phoebe Waller-Bridge) y su compinche Teddy (Ethann Isidore).
La pareja encontró a Ford no muy diferente a su personaje, con Isidore diciendo que se pasó el rodaje "haciendo bromas atrevidas, como las de Indiana Jones".
Para Ford, el personaje siempre tendrá un lugar entrañable en su corazón.
"Significa para mí lo que significa para el público. Cuando miro atrás, pienso que fueron buenas historias, buenas películas. Estoy muy orgulloso de haber formado parte de ellas", dijo.
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