Espectacular, así fue el concierto que ofreció anoche Alfredo Olivas en el Palacio Sultán, haciendo de la velada su gran regreso triunfal a Monterrey en este 2025.
No hay fecha que no se llegue ni plazo que no se cumpla, y tal como lo prometió desde meses atrás, el músico sonorense complació con un concierto único y hasta ahora el más impactante que ha presentado en la ciudad.
Y es que el cantante llegó con el único objetivo de ofrecer una noche impresionante al ritmo de banda y norteño que sus fans jamás olvidarán.
Fue en punto de las 22:30 cuando el Palacio Sultán se oscureció para recibir al sonorense, acompañado de su banda. El show inició con un video introductorio en el que apareció un bebé en gestación y que marcó el arranque al Vivo Tour.
Al ritmo del tema “Vivo” y saliendo entre las columnas de una especie de castillo, fue como Olivas empezó la velada y reencuentro con el público regio.
“Bienvenido sea todo el mundo. Gracias por acompañarnos, a nombre de mis compañeros y por supuesto de su amigo y servidor Alfredo Olivas, sean bienvenidos”, mencionó el cantante, para luego agradecer a todos los fans que viajaron de otros estados del país para disfrutar de su concierto.
Al inicio del concierto, unas gotas de lluvia comenzaron a caer en el estadio, eso no frenó los ánimos de miles de asistentes que ya esperaban con ansias corear los grandes éxitos del intérprete.
“Nos cayó la brisa a la pasarela y yo ando estrenando botitas, esa combinación no gusta, así que si doy el Juangabrielazo está bien, el que avisa no es traidor”, compartió entre risas el cantante.
Sin duda alguna, la megapantalla que lo acompañó se convirtió en uno de los principales atractivos de la noche, la cual permitió que el público pudiera disfrutar del espectáculo desde cualquier parte del Palacio Sultán y que no se perdiera ningún detalle de lo que ocurría sobre el escenario, además de disfrutar de elementos visuales que se estuvieron proyectando en cada canción.
El cariño del público quedó demostrado desde los primeros minutos, pues Alfredo recibió un regalo muy especial por parte del público: se trató de un pequeño peluche inspirado en él y que abrazó en un par de canciones.
Fueron sus fans quienes también se esmeraron en elegir sus mejores outfits, en los que predominaron las camisas a cuadros y sombrero norteño.
nrm
