El UFC regresó al Madison Square Garden de Nueva York con UFC 230, un evento liderado por el campeón simultáneo Daniel Cormier (monarca del peso semi completo y completo), y Derrick Lewis, en una contienda por el título de la división más pesada de la promotora.
El luchador olímpico defendió por primera ocasión el cinturón que le arrebató a Stipe Miocic en la estelar de UFC 226 el 7 de julio. En una pelea pactada a cinco asaltos, a ‘DC’ le bastaron dos para acabar con Lewis y retener el título tras someterlo con un mataleón pasada la marca del segundo minuto.
De las tres peleas que lleva en el 2018, Cormier ha anotado sólo victorias y se coronó en una segunda categoría de peso.
La coestelar, programada para ser un duelo de peso medio entre Chris Weidman y Luke Rockhold, sufrió un cambio por una lesión de este último, quien fue remplazado por el brasileño Ronaldo Souza. ‘Jacaré’ conectó un golpe de derecha a la cabeza del estadounidense, que lo mandó directo a la lona, donde lo finalizó con un par de golpes en el asalto final.