El señor Vutch en los últimos días ha incrementado “el número de infracciones sexuales domésticas”. Ya no le basta con agredir a su esposa Julian, también quiere abusar de sus hijas Anita y Lulú. Las tres viven en peligro y maltrato constante, pero un día aparece “un superhéroe”, el señor Paul Vurd, quien llega a sus vidas para que, irónicamente, nada cambie, sin dejar de hacer la farsa de acudir a su rescate, pues lo que importa es quedar bien con una sociedad a la que solo le interesan las apariencias.
Espacio Vacío —compañía creada en 2018— eligió como primer trabajo el texto Tatuaje, de la reconocida dramaturga alemana Dea Loher, a partir de la traducción de David Olguín y Carola Dür, ya que para sus integrantes la violencia doméstica es “resultado particular de un mal común de las sociedades modernas (y no tan modernas), que se remite, entre otras teorías, al surgimiento de la estructura de la familia como nicho del modelo económico capitalista”. Loher siempre ha buscado, desde sus primeros textos, incitar a la reflexión y al debate así como exponer males sociales, por muy crudos que puedan ser.
Fundada en una lógica misógina, esta familia validó y perpetuó la subordinación de sus integrantes niñas, niños y mujeres a la voluntad del varón, negándoles derechos básicos de libertad y autonomía hasta nuestros días, explica la directora de escena Paola Dávalos. Y continúa diciendo: “Nada en esta historia es casualidad. Ningún caso es aislado. Nosotros buscamos soluciones con la crítica al fenómeno social y, corroídos por lo externo, los vemos deambular en los laberintos de sus pensamientos”. La obra cuenta con las actuaciones de Kandy Ramírez, Lauro Longoria, Danya Torres, Saúl Calzada Páez y Azael Novelo.
Tatuaje se presentará en el Teatro Benito Juárez los jueves y viernes a las 20:00, sábados a las 19:00 y domingos a las 18:00, hasta el 21 de julio. El costo del boleto es de 195 pesos y puede adquirirse en taquilla o a través del sistema Ticketmaster. Se recomienda el uso de cubrebocas.
AMS
