Ana García Bergua vino a la edición 37 de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara a presentar La escalera eléctrica, bajo el sello de Attica y la Universidad Autónoma de Nuevo León. “Son textos breves que publiqué en prensa entre 2005 y 2017 y que volví a trabajar para que quedaran en un libro”, comentó.
Durante la presentación, Zaira Espinosa, editora y gestora cultural, recordó a José de la Colina, quien se refirió a la obra de Ana García Bergua como realista, humorística y fantástica.
“Los textos son breves ensayos de lo cotidiano, de la poesía de las cosas. Ana se concentra en los espacios que nos unen y los que nos separan. Nos propone un encuentro con la fantasía a través de un rompecabezas, un elevador, los gatos, el mercado, un hotel”, agregó.
“La escritura es un trabajo a largo plazo. Se puede escribir un texto y pasar muchos años antes de que se publique. No importa el tiempo que haya pasado desde que lo escribes. Si es necesario, siempre lo puedes retomar”, compartió la escritora, quien agregó que trabaja una novela que espera terminar en 2024.
“Me gusta recrear ambientes, inventar personajes, fabular. Ya había hecho algo parecido a La escalera eléctrica. Me refiero a una compilación de mis colaboraciones en prensa y que titulé Pie de página. En La escalera eléctrica logré reunir entre 40 y 50 textos. Muchos se quedaron fuera, tal vez los retomaré en otro libro igual”.
Ana García Bergua añadió que le ha llamado la atención que algunas de sus novelas hayan despertado cierto interés para ser adaptadas al cine, aunque no hay nada concreto. “Si se diera el caso, creo que La bomba de San José o Waikiki, que hice a cuatro manos con Alfredo Núñez Lanza, son textos muy cinematográficos”.
