Luego de que el cielo se iluminó con la presencia de la hermosa Luna Rosa, la cuál fue perceptible entre la noche del 12 y sábado del 13 de abril, otro de los fenómenos astronómicos que podrían llegar a cautivarte es la lluvia de meteoros Líridas, también llamada Lluvia de Estrellas.
Por ello, aquí te contamos más de este gran espectáculo de lluvia radiante, el cual ocurre cada año en el mes de abril. Sin embargo, en Notivox te contaremos si podrá verse en México y cuándo es la fecha de su llegada.

¿Podrá verse la Lluvia de Estrellas Líridas en México?
La respuesta inmediata es SÍ, el cielo se iluminará con esta fascinante lluvia de meteoritos que podrá verse en México entre el 16 y 25 de abril, registrando su punto máximo el 22 de abril.

¿Qué es la lluvia de estrellas Líridas?
Las Líridas son una de las lluvias de meteoros más antiguas, observadas desde hace más de 2.700 años.
Cada abril, ofrecen un espectáculo natural con meteoros brillantes que cruzan el cielo, especialmente visibles en el hemisferio norte.
En 2025, alcanzarán su punto máximo entre la noche del 21 y la madrugada del 22, con hasta 18 meteoros por hora en cielos oscuros. Aunque no son tan intensas como las
Perseidas, las Líridas pueden sorprender con ráfagas inesperadas y bolas de fuego ocasionales.
El punto de origen aparente está en la constelación de Lira, cerca de la estrella Vega, pero los meteoros pueden aparecer en cualquier parte del cielo.

¿Debería usar telescopio?
No, la buena noticia es que esta mágica lluvia de estrellas podrá ser admirada sin necesidad de usar un telescopio, ni equipos especiales.
¿Cómo ver mejor el fenómeno de la lluvia de estrellas?
Busca un lugar oscuro y aléjate de las luces, recuéstate mirando hacia arriba y ten paciencia. Después de unos 30 minutos, tus ojos se adaptarán y podrás disfrutar del espectáculo hasta el amanecer.
De acuerdo con la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), los meteoritos provienen de partículas de cometas y fragmentos de asteroides fragmentados. Cuando los cometas orbitan el Sol, dejan una estela de polvo tras de sí. Cada año, la
Tierra atraviesa estas estelas de escombros, lo que permite que los fragmentos colisionen con nuestra atmósfera, donde se desintegran creando vetas brillantes y coloridas en el cielo.