Ganar una elección requiere de metodología y trabajo. Y en muchos casos, cada vez más, del apoyo de un consultor en materia política. Daniel Ivoskus, experto en materia de campañas y consultoría, lo tiene claro: quien manda es el candidato, pero el consultor es el responsable de la acción, y de los resultados.
Ivoskus pasó de la política como candidato en su natal Argentina, a la política como consultor en diferentes puntos del continente. Además de trabajar directamente con aspirantes a cargos de elección popular en diferentes países, es autor de diferentes libros, Matrix Política el más reciente, y presidente de la Cumbre Mundial de Comunicación, que tendrá lugar en Cancún en diciembre próximo.

En charla con MILENIO, Daniel Ivoskus comparte su visión sobre el trabajo que se desempeña en materia de consultoría política.
¿Por qué un político necesita de un consultor?
Por una multiplicidad de factores. Primero porque el político tiene que dedicarse a ser candidato y no consultor; es uno de los grandes errores que cometen los políticos, que creen que pueden ser consultores, periodistas, recaudadores de recursos, gestores, analistas... y en realidad lo que necesitan hacer en una campaña electoral es dedicarse a ser candidatos.
“Ser candidato es una tarea muy compleja. Hay mucha tensión, condicionantes para poder hacer otras cosas, complicado hacia dentro de la familia también. Y el consultor lo que hace es poner un equipo profesional a disposición de hacer más competitivo a ese candidato, y que en un proceso electoral trate de cumplir sus objetivos, que en la mayoría de los es ganar una elección; en otros puede ser posicionarse; en otros puede ser entrar como senador, como diputado, pero en definitiva lo que hace el equipo de consultoría es la búsqueda de cumplir objetivos”.
“Y en ese cumplir objetivos, el consultor hace que durante un determinado tiempo tenga a un equipo competitivo en redes sociales, en el tema discursivo, en los medios de comunicación, en no equivocarte en qué hacer en el territorio. En base a ese candidato, que tiene ideas, que tiene proyectos, que quiere acceder a un cargo público para llevar adelante una ciudad, un país, para conseguir ese objetivo debe tener un equipo competitivo”.
“Hoy las campañas electorales, cada vez más, se han hecho hipercompetitivas. Primero porque tenemos cada día más una sociedad más exigente. Porque entramos a la etapa de la inmediatez. porque la sociedad cambia. Porque la paciencia hacia la política y a los políticos cada vez es menor, y no hay tolerancia a los errores”.
“Yo comenzaría al revés: un consultor político lo primero que tiene que hacer y construir en un político, es que no cometa errores”.
Cuando un consultor trabaja con un político, ¿quién manda?
En Matrix Política hay un capítulo específico que trata específicamente de eso. Ese es el punto clave. Lo que nosotros planteamos es que siempre la última palabra, la decisión, es del político, pues quien lidera un proceso, y tiene además una visión, una percepción general. Lo que hace el consultor es decirle: mira, nosotros entendemos que este es el mejor camino posible. Ahora debemos animarte a hacerlo, a recorrerlo, te tienes que convencer. Pero la última palabra siempre es del candidato. Siempre. Si no, vas a tener problemas, vas a tener candidatos que hacen lo que les dicen las encuestas, y eso es un gran problema. Son productos de marketing, no son líderes.
“Lo que te permite la consultoría es tener una visión más amplia, una visión 360. Es tener asesoramiento externo, que sabes que quien te habla como consultor no te dice lo que te dice porque te tiene adelante, ni tampoco porque quiere ser diputado, o alcalde, ministro... El único objetivo que tiene es ganar la elección. Y esa opinión, que no está intoxicada, que es totalmente genuina, que va sobre un objetivo específico, es muy importante en las campañas electorales. Porque en los círculos rojos, que son los que rodean a un político, a un gobernante, hay multiplicidad de intereses, y en esos interese, a veces, te hacen tomar decisiones erróneas, o te hacen equivocarte. Pero la última palabra, la decisión final después de la discusión, siempre es la del candidato.
¿Un consultor puede tener ideología? ¿No importa con quién trabaje?
Son decisiones personales. Todo consultor tiene su ideología, pero eso no quiere decir que le estorbe para hacer un trabajo profesional. El profesional es profesional y puede dirigir una campaña de la mejor manera.
La Cumbre Mundial de Comunicación va a ser el 4, 5 y 6 de diciembre en el centro de Convenciones de Cancún. ¿Para quién está pensada?
La mesa de la cumbre tiene cuatro patas: políticos, consultores profesionales, academia tanto estudiantes como docentes, y periodistas. Eso es tanto para quienes van a exponer más de 300 conferencias, como para los asistentes. En la mayoría de los casos asisten aspirantes, gente que está en función de gobierno, estudiantes, profesionales, periodistas, y eses es el ambiente en el cual se nutre la Cumbre. Arriba del escenario con experiencias contadas por políticos en primera persona; con consultores que han participado en campañas; con periodistas, que ahora tocan el tema de las noticia falsas; las redes sociales... Hay una multiplicidad de temas que se van a tocar.
JMH