El gobernador michoacano, Alfredo Ramírez Bedolla, dijo que se trata de un crecimiento histórico, el cual busca llegar a la meta de proteger más de 500 mil hectáreas entre el estado y la federación, antes de concluir su administración.

Por ello, refrendó su compromiso de contribuir a la preservación de los ambientes naturales con la declaración de nuevas áreas de conservación, como la formación de corredores biológicos en zonas estratégicas o el reforzamiento de la vigilancia a través de la tecnología satelital.

La biodiversidad, prioridad en el futuro
El mandatario expuso que no solo es dar protección a hectáreas de bosques, sino cuidar la biodiversidad, la calidad del aire y el agua. en beneficio de futuras generaciones.
Como los esfuerzos que se realizan para continuar con el rescate y conservación del lago de Pátzcuaro y su cuenca, donde participan habitantes de comunidades cercanas a través del Programa de Empleo Temporal; con acciones de reforestación, restauración de suelos y construcción de presas de gavión.
“Es un esfuerzo colectivo”, manifestó el gobernador, al subrayar el interés de las comunidades para sumarse a esta política ambiental.
Ejemplo de ello es la reciente entrega de certificados de áreas voluntarias para la conservación del corredor biocultural de la zona norte del lago de Pátzcuaro a las comunidades indígenas de Santa Fe de la Laguna, San Andrés Tziróndaro, Oponguio, Napízaro y San Jerónimo Purenchécuaro; que protegerán cerca de 8 mil 200 hectáreas de bosque.

AG