Derivado de la construcción de una sala de titulación en la Facultad de Humanidades de la Autónoma mexiquense, quitaron el “Mural en memoria a los 200 Sauces de Tollocan”, creado durante el paro estudiantil al inicio del año.
La autora, quien pidió no publicar su nombre, consideró que estas pinturas son registro histórico de las luchas sociales y una forma de concientizar a la sociedad, “que lo borren hace saber que no han entendido nada sobre los que nos enseñan ahí adentro”.
Actualmente hay 6 murales que representan problemas sociales como feminicidio, migración y contaminación industrial, lo cual precisó son un recordatorio de la importancia de que los universitarios apliquen su conocimiento para generar soluciones, "son temas que deberían resolver en lugar de querer ocultar".
Frente al planteamiento de otorgar los derechos de las obras a la casa de estudios, puntualizó que se trata de trabajos en su mayoría anónimos y donados a la comunidad estudiantil.
“Es un intento de adueñarse de un esfuerzo que en lugar de apoyarlo en su momento lo entorpecieron, no es ético, pero es una decisión de la comunidad porque les donamos lo que hicimos”.
Por su parte, Fernando Díaz Ortega, director del espacio académico, señaló que al inicio de su administración propuso la creación de la sala de titulación que se autorizó antes de que los alumnos iniciaran el paro.
“Se adecuó un espacio que era un laboratorio de digitalización, desde hace 7 años no funcionaba porque el equipo era obsoleto por eso se generó el proyecto desde hace dos años, era algo que hacía falta y por la naturaleza de la obra se quitó el mural".
La decisión, dijo, se tomó en las mesas de trabajo que llevan a cabo para atender los pliegos petitorio y acordaron una consulta entre la comunidad de humanidades para determinar el futuro de los otros murales.
"La organizaron los alumnos para determinar cuáles se quedan o no, es vía correo institucional para que sean consultados docentes, administrativos y estudiantes, todos tienen un voto con el mismo valor".
Invitó a los involucrados a participar y ver las acciones que benefician el diálogo y las condiciones, "como esta sala que se necesitaba, es algo positivo, no hay que confrontar a la comunidad, hay que unificarla siendo respetuosos".