En lo alto de la alcaldía Cuajimalpa, los habitantes de la colonia La Pila se sienten inseguros cada noche, porque la oscuridad invade las calles por las que tienen que caminar para llegar a casa después de ir a trabajar.
Es una localidad boscosa, montañosa, una de las más alejadas de la ciudad porque se ubica en los límites con el Estado de México.
El clima casi siempre es gris. Lluvioso o al menos, nublado. Pocas veces sale el sol. Y a veces, en los tiempos de más frío, nieva. De algunas pequeñas casas sale el humo por chimeneas. De noche, el ambiente es sombrío y solitario. Las pocas luminarias que hay no son suficientes o muchas están descompuestas. Sin duda, la prioridad para esta comunidad casi rural es el alumbrado público.
Por eso, uno de los proyectos que se han planteado en esa colonia para ejercer el Presupuesto Participativo de este año, que asciende a 1.6 millones de pesos, es el de colocar lámparas tipo vela a lo largo de la calle principal y los callejones secundarios. Con eso, pretenden inhibir los delitos.
Dalia Morado, vecina de la colonia, afirma que la falta de alumbrado público tiene muchos años. Lo peor es que la ausencia de luz y el poco transporte público, propicia delincuencia.
“Genera inseguridad porque está cerca de la carretera. No nada más que entre pobladores haya algún ratero, sino por la gente que pasa por la carretera. Sí da miedo pasar ya muy noche. El último camión que llega es a las 11. Si hay algo de tránsito, llega como a las 12. A esa hora es mejor que alguien te venga a encontrar o estar muy cuidadoso al caminar”, platica.
Incluso, entre los vecinos que llegan noche, se esperan y se acompañan para no andar solos.

La señora Josefina Sánchez coincide con ella. “Yo llego a las 10 de la noche de trabajar. Yo vivo aquí en la segunda cerrada, pero está todo oscuro y no se ve nada”, lamenta.
Más de 13 mil proyectos vecinales, 2 mil mdp
El pasado 11 de julio comenzó la promoción de los más de 13 mil proyectos para mejorar las colonias de toda la ciudad con recursos del Presupuesto Participativo, que corresponde al 4 por ciento del dinero que reciben cada año las alcaldías y que, según la Ley de Participación Ciudadana de la capital, debe ejercerse como lo decidan los vecinos en consulta pública.
Este año, las mil 781 unidades territoriales en que se dividió la ciudad recibirán un total de 2 mil 143 millones 295 mil 975 pesos.
“En promedio tenemos que son 941 mil pesos por cada unidad territorial”, explica la Cecilia Hernández, consejera del Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM), que es la institución responsable de organizar y llevar a cabo la consulta ciudadana para que los vecinos de cada colonia propongan y elijan el proyecto que más beneficios traiga a sus comunidades.
En una revisión a la lista de los miles de proyectos inscritos para la consulta de este año, la constante es solicitar alumbrado público.
A pesar de que mantener las calles iluminadas es responsabilidad del gobierno capitalino y las alcaldías y de que, en teoría, el Presupuesto Participativo debe usarse en propuestas novedosas, la omisión de las autoridades ocasiona que los vecinos insistan en inscribir proyectos para colocar luminarias.

“Podemos llegar al punto de que aunque le toque a la alcaldía, la gente diga: ‘ya entendí, pero aquí lo que hace falta son luminarias, entonces lo voy a seguir proponiendo, porque si no llega vía las atribuciones de la alcaldía, por lo menos que llegue en formato de Presupuesto Participativo’”, admite la consejera Hernández.
Hay de prioridades a prioridades
Sin embargo, cada colonia tiene sus propias prioridades y muchas veces son contrastantes.
Por ejemplo, en la colonia Bosques de las Lomas, que comparte territorio entre la alcaldía Cuajimalpa y la alcaldía Miguel Hidalgo, a los vecinos les preocupa que los letreros de sus calles ya están viejos, oxidados e incluso mal colocados y por eso, uno de los proyectos inscritos para ejercer el Presupuesto Participativo que les toca, consiste en renovarlos.
La diferencia también se nota en los recursos que cada colonia puede ejercer. Mientras en La Pila, sus recursos se limitan a 1.6 millones de pesos, en Bosques de las Lomas podrán ejercer 2.6 millones de pesos en el área que le toca a Cuajimalpa y 1.1 millones de pesos en el área que le toca a Miguel Hidalgo.
La consejera Cecilia Hernández explica que el criterio para repartir el recurso entre las unidades territoriales consiste en lo siguiente: el 50 por ciento de los recursos se reparten de forma igualitaria entre todas y el otro 50 se determina con base en una fórmula que considera el índice de pobreza multidimensional, la incidencia delictiva, la condición de pueblo originario, la condición de pueblos rurales, cantidad de población, de acuerdo a las estadísticas del Inegi y la población flotante de las alcaldías.

Otro ejemplo es la colonia Jardines en la Montaña, en la alcaldía Tlalpan, una zona de alto nivel adquisitivo, aledaña al Bosque de Tlalpan, cuyas calles están cerradas sólo para el tránsito local. Ahí, una de las propuestas para ejercer su Presupuesto Participativo es una pista de tartán para comodidad de los vecinos que salen a correr.
Pese a la disparidad entre proyectos, las autoridades electorales aseguran que cada colonia es libre de decidir sus prioridades.
“Cada proyecto refleja la realidad de cada una de las unidades territoriales. Tiene que ver con este contraste, con esta diferencia de cómo vivimos en una misma ciudad”, dice la consejera.
La de 2025 será la consulta de presupuesto participativo número 15 que se realiza en la Ciudad de México y se llevará a cabo, vía electrónica, del 4 al 14 de agosto, y de manera presencial, el 17 de agosto.
SNGZ