Bajo las consignas de un grupo de aproximadamente 150 personas, que se jactaban de ser religiosas, se manifestó frente a Palacio Municipal de Guadalajara y el Congreso del Estado para demostrar su inconformidad contra la iniciativa de prohibir las terapias de conversión sexual, aquellas que prometen quitar la homosexualidad.
La iniciativa fue propuesta por el diputado Salvador Caro. El siguiente paso es que sea discutida en el pleno del Congreso del Estado para que se consiga reformar el artículo 201 del Código para el Estado Libre y Soberano de Jalisco.
De aprobarse se impondrán de 1 a 3 años de prisión y la inhabilitación de su ejercicio profesional por el mismo tiempo a la persona física o moral que, “imparta, promueva, emplee, aplique, obligue o financie cualquier tipo de método, tratamiento, terapia, práctica no quirúrgica o servicio con o sin fines de lucro con el objeto de modificar, reorientar, menoscabar, restringir o anular la orientación sexual o identidad sexual de una persona”.
Los manifestantes gritan consignas como "Ley Caro para atrás" y argumentaron que la iniciativa es una imposición ideológica que sigue una tendencia internacional y atenta contra la educación familiar.
JMH