La educación es el antídoto natural contra la cultura individualista y los docentes tiene la responsabilidad de ser constructores de esperanza y formadores de corresponsabilidad y de paz, expresó el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa.
Al encabezar la misa dominical en la Catedral Basílica de Puebla, inmueble que se mantuvo con un aforo reducido y con medidas sanitarias para evitar contagios de covid-19, Sánchez Espinosa resaltó la importancia de los trabajadores de la educación.
“Celebramos el día del maestro, de la maestra. El Papa Francisco, con motivo de esta fiesta, dice que el maestro es constructor de esperanza, formador de corresponsabilidad y paz”, comentó el líder de la grey católica en Puebla.
Sánchez Espinosa resaltó que la educación es una de los caminos para lograr la humanización y, al mismo tiempo, permite que las personas puedan actuar con responsabilidad y amor hacia los demás, alejándose del individualismo.
“La educación es un acto de esperanza, la educación es una de las formas más efectivas de humanizar el mundo y la historia. La educación es una cuestión de amor y de responsabilidad que se transmite de generación y generación. La educación es el antídoto natural a la cultura individualista. En estos puntos, encontramos lo que le da sentido a la labor de los maestros y maestras, y de los demás agentes involucrados en la educación”, apuntó.
Reiteró que la misa de este domingo 16 de mayo, un día después de la celebración del día del maestro, la ofrece por los docentes y trabajadores que están relacionados con la docencia y por sus familias, quienes se esfuerzan todos los días por cumplir con sus labores.
“Ofrezco esta misa por los maestros, por las maestras, por sus familias. Quiero felicitarlos y expresarles mi mayor gratitud y reconocimiento por su trabajo esforzado, por su vocación asumida y por su entrega constante”, expresó.
En otro tema, Sánchez Espinosa resaltó que el pasado 13 de mayo se celebró a Nuestra Señora de Fátima, ante lo cual, hizo oraciones por las madres, vivas o difuntas, ya que son la base de la unidad y la convivencia familiar.
AFM