Hasta ahora, han sido aislados los contagios de perros y gatos con el virus SARS-CoV-2, por lo que la Organización Mundial de Salud Animal (OIE) aseguró que no hay evidencia de que los animales de compañía transmitan la enfermedad y no existe justificación alguna para abandonarlos y mucho menos sacrificarlos. Así que mientras el número de contagios entre humanos crece en México, el país ya está preparadas con 18 laboratorios de salud animal de bioseguridad ante eventuales contagios a mascotas.
“Tenemos capacidad para hacer los diagnósticos en caso de detectar alguna anormalidad en cualquier animal, tanto felinos en los zoológicos como felinos domésticos, tenemos laboratorios en todo el país con nivel de bioseguridad 2, que es un nivel de alta contención para manejo de estos virus, y un laboratorio aquí en Ciudad de México nivel 3 de alta seguridad, donde podríamos aislar el virus si fuera necesario para hacer las investigaciones”, señaló Roberto Navarro López, director de la Comisión México-Estados Unidos para la Prevención de la Fiebre Aftosa y otras Enfermedades Exóticas de los Animales (CPA).
El Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) de la Secretaría de Agricultura, de quien depende la comisión, implementó un programa de vigilancia epidemiológica en animales de compañía en coordinación con la Federación de Colegios y Asociaciones de Médicos Veterinarios Zootecnistas de México, por lo que también se emitieron recomendaciones dirigidas a los veterinarios del país para prevenir y detectar posibles casos de covid-19 en animales expuestos a personas contagiadas.
En caso de sospecha del virus en una mascota, el médico veterinario primero debe confirmar que el ejemplar estuvo en contacto con una persona enferma y después tomar una muestra de hisopado nasal o faríngeo y mantenerla en refrigeración en un tubo estéril, y notificar al Senasica para que su personal oficial lo traslade al laboratorio de alta seguridad, todo bajo las medidas básicas de bioseguridad.
–¿La prueba es similar a la que se aplica en personas?
“Es exactamente la misma, son pruebas moleculares, pero también tenemos la capacidad de aislar los virus. Para nosotros los veterinarios, el manejo de coronavirus no es extraño, tenemos enfermedades de las aves desde hace muchos años que no son peligrosas y existen vacunas. Existen enfermedades de los cerdos que provocan diarreas por coronavirus que no afectan a las personas y esos agentes infecciosos los manejamos en el laboratorio, sabemos que son virus que fácilmente se pueden inactivar con desinfectantes comunes. La situación de los coronavirus es que son altamente transmisibles, pero no se mantiene demasiado tiempo en el ambiente”.
Roberto Navarro López detalló que el Senasica cuenta con 17 laboratorios de biología molecular en el interior del país de nivel 2, que tienen capacidad para realizar hasta 5 mil pruebas de reacción en cadena de la polimerasa. Mientras que en el laboratorio nivel 3 se llevaría a cabo el aislamiento del virus para su estudio.
“En una prueba molecular únicamente identificamos los ácidos nucleicos que nos identifican que se trata del virus que provoca el covid-19, el material genético, pero aislar el virus, significa sembrarlo en cultivos celulares, amplificarlo y poder hacer muchísimos estudios más que nos permitirían hacer trabajos de investigación y el secuenciamiento del mismo, para comparar si tiene mutaciones, respecto a otros virus que se han comparado en el mundo”.
El laboratorio de salud animal certificado como nivel 3 de bioseguridad (LBS3), ubicado en la alcaldía Cuajimalpa, cuenta con tecnología de vanguardia en sistemas de biocontención y equipos especializados para el diagnóstico de enfermedades emergentes y exóticas para México, donde se realiza diagnóstico por métodos moleculares y secuenciación de virus, bacterias y parásitos causantes de enfermedades exóticas y sus diferenciales endémicas.
Algunas son: fiebre aftosa, peste porcina africana, lengua azul, encefalopatía espongiforme bovina, scrapie, mixomatosis de los conejos, enfermedad hemorrágica viral de los conejos, encefalitis equina del este y oeste, fiebre porcina clásica, influenza aviar de alta patogenicidad, pequeño escarabajo de colmena, estomatitis vesicular, virus del oeste del Nilo, enfermedad de Newcastle velogénico, influenza porcina endémica, entre otras.
jlmr