Luego de 30 horas quedaron reabiertas a la circulación vial las carreteras federales El Seco Azumbilla y Tehuacán -Orizaba, ya que el grupo de inconformes del municipio de Nicolás Bravo se retiró tras sostener un diálogo con funcionarios de la Dirección General de Gobierno y el alcalde Mario Gines Hernández. En la negociación se acordó el mejoramiento de servicios y aumento a las participaciones que se reciben cada mes.
Sobre este último punto, se solicitará a la Secretaría de Finanzas conocer el monto para el ayuntamiento, con el fin de determinar si habrá un aumento, se mantiene la misma proporción o se ajusta. Asimismo, se dará mantenimiento a patrullas para mejorar la seguridad en la demarcación asentada en la Sierra Negra.
Los inconformes pidieron que se les atienda con obra pública de acuerdo con las peticiones entregadas a la autoridad municipal, la cual “no ha dado respuesta” a quienes radican en las comunidades subalternas de Corratel, San Isidro Ahuatlampa, Santa Ana y Los Camotes.
Para esto, los pobladores demandaron un desglose de los ingresos del ayuntamiento para conocer cómo se aplican los recursos económicos y si el porcentaje que se entrega a cada una de las comunidades subalternas es el correspondiente.
El presidente municipal Mario Ginez Hernández indicó que el ayuntamiento recibe un promedio de 600 mil pesos de participaciones, suma que se puede consultar en el portal de la Secretaría de Finanzas, pero que resulta insuficiente para cubrir los gastos en las distintas áreas de la administración municipal.
Por tanto, dijo que está abierto al análisis que solicitan los inconformes para que conozcan por qué no se atienden las demandas de obras públicas.
CHM
