La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, la perredista Angélica de la Peña, hizo un llamado a quienes se manifestaron a favor del matrimonio igualitario y en pro de un modelo único de familia, a actuar dentro del marco del respeto a la ley, a la paz y a la tranquilidad.
"En una democracia la convivencia entre la diversidad se logra con el respeto a la igualdad de derechos", dijo.
Consideró que lo que menos necesita el país son confrontaciones "estériles y discursos de odio e intolerancia" que generen fracturas en el tejido social, por lo que las manifestaciones a favor del llamado matrimonio igualitario o de la denominada familia natural deben transcurrir sin expresiones de violencia ni discriminación.
Indicó que el derecho a la libre manifestación y expresión están garantizados para todos los ciudadanos mexicanos, por lo que las solicitudes para que se cancele o postergue una u otra, son simplemente una muestra de la ignorancia de nuestro marco jurídico.
Señaló que los ministros de culto y jerarcas de todas las asociaciones religiosas que buscan influenciar en las decisiones de los legisladores sobre la iniciativa de permitir los matrimonios igualitarios deben ser sancionados.
Explicó que los representantes de todas las asociaciones religiosas gozan de la libertad para expresar su opinión y participar en manifestaciones públicas, pero la ley les impone la limitante de no participar en política, "por lo que convocar, organizar y encabezar marchas en contra de una decisión del titular del Ejecutivo federal, es desconocer la jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y coaccionar a integrantes del Poder Legislativo para influenciar sus decisiones, eso es participar en política y debe ser sancionado".
JASR