El presidente Andrés Manuel López Obrador acusó que hay quienes buscaron “reventar” la investigación de la Comisión por la verdad y la Justicia del caso Ayotzinapa aumentando el número de órdenes de aprehensión contra militares para provocar una rebelión del ejército en su contra y porque estaba de por medio la detención del ex procurador Jesús Murillo Karam.
En la conferencia mañanera, en la que dedicó casi una hora al tema, el mandatario negó que existan presiones del Ejército hacia el Ejecutivo, en medio de las indagatorias contra militares y, para disipar este rumor, reveló que a través de un escrito le ordenó al secretario de Defensa que se permitiera la acción penal contra los integrantes de la Sedena involucrados en el crimen de los normalistas.
“Como en todo, hay intereses, buscaron reventar la investigación hablando de más personas, en el caso por ejemplo de los militares responsabilizando a 20, cuando en la investigación son cinco, claro, de alto grado, los otros 15 no sé, pero me imagino que son soldados. Pero, ¿por qué meten los 20? Pensando que con eso se iba a generar una rebelión en el Ejército y, si eran más, íbamos a tener que dar marcha atrás para no tocar a nadie, no, no, no, no, no. Cero corrupción, cero impunidad”, subrayó.
Por ello, dejó en claro que todos los que aparecen en el informe y que tienen responsabilidad en el caso van a ser requeridos por la fiscalía y, si existen otros involucrados, también se va a actuar, siempre y cuando existan pruebas.
López Obrador aseguró que hasta ahora desconoce la identidad contra quienes la Fiscalía ya no ejercerá acción penal y por eso se decidió únicamente tomar en cuenta las personas que menciona el informe.
“Supongo que son soldados porque lo que se debe de tomar en cuenta aquí es el coronel era el comandante del batallón de Iguala, entonces no se está protegiendo a nadie. Yo siento que hubo una actuación perversa”, indicó.
Sin embargo, reconoció que lo que no gustó fue que se actuara inmediatamente después de que se hizo público el informe, porque “algunos de los detenidos estaban muy confiados”.
“Entonces, en muy poco tiempo se actuó a partir del informe, cuando esto llega a la Fiscalía, cuando ese informe llega a la Fiscalía, como hay interpretaciones distintas, tratan, esa es mi interpretación, de dinamitar el proceso; porque estaba de por medio detener al procurador y estaba de por medio detener a militares”, agregó.
El Presidente dijo que las supuestas presiones de parte de la Sedena son parte de los rumores en torno a la investigación, porque las fuerzas armadas están muy conscientes de que no se puede encubrir a quien comete un delito, pues, en lugar de fortalecer, se debilita a la institución. No obstante, aceptó que estas versiones se prestan para golpetear al Ejército desde la oposición y hasta desde el extranjero.
Por tanto, aprovechó para dejar claro que instruyó al titular de la Secretaría de la Defensa (Sedena), Luis Cresencio Sandoval, que se permitiera actuar contra los militares que están incluidos en el informe de la comisión como presuntos responsables del crimen.
“En el informe son cinco militares, pero para más detalles, para más detalles, yo di la instrucción al secretario de la Defensa por escrito”, dijo.
—¿La instrucción de qué?—.
“De que se cumpliera con lo que establecía el informe de la comisión”, puntualizó.
López Obrador aseguró que hasta ahora desconoce la identidad contra quienes la Fiscalía ya no ejercerá acción penal y por eso se decidió únicamente tomar en cuenta las personas que menciona el informe.
“Supongo que son soldados porque lo que se debe de tomar en cuenta aquí es el coronel era el comandante del batallón de Iguala, entonces no se está protegiendo a nadie. Yo siento que hubo una actuación perversa buscando como la hay ahora”, indicó.
Aseguró que no existe una campaña contra el subsecretario y encargado de la comisión por la verdad, Alejandro Encinas, y si es que existe, “hay campaña en contra mía”. Finalmente, el mandatario insistió en que el informe completo debe ser público.
“Deseo con toda mi alma el que se pueda dar a conocer sin testar todo el informe y los anexos, porque eso ayuda mucho. Eso los molesta, como tú dices, a los de adentro, pero también a los de afuera, les molesta mucho, porque hay quienes viven de la administración del conflicto”, concluyó.
El presidente López Obrador dijo que cuando a la administración anterior le creció el problema, optaron por fabricar la verdad histórica. Además, reveló que en el informe no están señalados el general Salvador Cienfuegos ni el ex presidente Enrique Peña.
“Hasta mi amigo Epigmenio (Ibarra, pregunta) y ¿por qué no (actúa contra) Peña?, que acompañe a Murillo Karam’. Pues que Murillo hable, que diga si se le dieron instrucciones, porque en el documento no aparece como responsable Peña, aparece Murillo”, dijo el mandatario.
Y sobre el papel del ex general secretario igualmente afirmó:
“O sea, no es un asunto del general Cienfuegos, es un asunto de una autoridad civil. ¿Quién es el comandante supremo de las Fuerzas Armadas? No, eso mínimo fue un error, mínimo fue un error, porque ¿cómo es posible que se quiera ocultar una realidad?, o sea, la verdad, ¿por qué?” y recordó que después de la matanza del 68, la responsabilidad la asumió Gustavo Díaz Ordaz.
Al lamentar el dolor de los padres por la desaparición de sus hijos, el Presidente también dijo: “lamento, ¿cómo meter a las instituciones en un conflicto de esta naturaleza? ¿Por qué debilitar al Estado? ¿Por qué debilitar a una institución como la Secretaría de la Defensa? ¿Qué no se pudo al día siguiente, a los dos días, a la semana, una vez que se tenía toda la información decir ‘fue así’? ¿Por qué engañar? ¿Por qué inventar? Pues, la única explicación es que dijeron: ‘No podemos meter aquí a elementos del Ejército porque está de por medio la institución’, y usaron eso".
“Y otro también la impunidad, el pensar: ‘No va a pasar nada, ¿qué va a suceder?, ¿quién va a reclamar por estos jóvenes revoltosos?’, por el clasismo, volvemos a lo mismo, el desprecio”, dijo.
LP