En Sinaloa, un amplio sector de mujeres aspiran desde niñas a llegar a la edad en la que se puedan someter a cirugías estéticas que molden sus cuerpos. La imagen aspiracional son cinturas pequeñas, busto grande y caderas con glúteos prominentes; la imagen tradicional de las denominadas "buchonas".
En las últimas décadas, el narcotráfico ha trascendido más allá de las noticias de crimen y violencia. En entregas anteriores, Notivox explicó cómo la imagen de algunos capos se ha insertado en series, películas y música casi como una figura heroica, admirada por cientos de miles.
¿Pero qué hay de la estética narco, usualmente exagerada y ostentosa, que se ha posicionado como un ícono cultural?
Narcocultura visual: joyas, armas y autos como símbolos de estatus
Desde las joyas de oro hasta los autos de alta gama, los narcotraficantes han adoptado un estilo visual que no solo comunica poder, sino que también ha capturado la atención de la juventud a nivel global.
La narco-estética, también llamada estética del narco, es un conjunto de códigos visuales, simbólicos y culturales que representan y glorifican el estilo de vida de los narcotraficantes.
Los elementos más populares se centran en la moda y el cuerpo, donde el exceso es la norma: oro, ropa con logotipos de marcas visibles, cadenas gruesas, relojes de lujo como Rolex o Richar Mille, vestimenta ajustada y en las mujeres cuerpos intervenidos quirúrgicamente.
También es visible en la arquitectura y la decoración.
Ejemplo de ellos son las tumbas de narcotraficantes, construidas para destacar sobre las demás. A menudo tienen la apariencia de mausoleos, con techos decorados, columnas o incluso estructuras que simulan pequeños palacios.

El surgimiento del término "buchón" como parte de la narco-estética
Acorde con Ramón Ismael Alvarado Vázquez, académico de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), la narco-estética impulsó el surgimiento del término "buchón".
"En Sinaloa se le conoce como buchón a los que se distinguen por las manifestaciones faraónicas o de exaltación en el vestir, en el consumo (carros, motos, yates, casas), en la prepotencia por la forma de actuar, en el gasto fácil del dinero y en la creencia de que el éxito se consigue a través de la violencia".
El experto en ciencias sociales apunta que la imagen del buchón ha influido en las transformaciones culturales de consumo, del gusto y del estilo de vida.
"La imagen del gomero, del mariguanero, del narco evolucionó hasta llegar a la del buchón. Se convierte en una expresión cargada de símbolos violentos, con la imagen de Malverde, la AK 47 y la hoja de marihuana".
El término tiene su origen en el noroeste de México, especialmente en los estados de Sinaloa, Sonora y Durango, regiones donde la cultura narco ha tenido una fuerte presencia histórica.
La vestimenta: de las marcas a lo que usan los capos
En el narcotráfico, más que cubrir el cuerpo, la ropa comunica: riqueza, violencia, estatus, desafío, y en algunos casos, hasta impunidad.
Se privilegia la ropa de marcas de lujo como Gucci, Versace, Luis Vuitton o Balenciaga. Los logos visibles y las camisas estampadas son mucho mejor.
El uso de estas marcas por parte de narcotraficantes no sólo ha impulsado que aquellos que los ven como figuras de admiración busquen productos similares, sino también a intentar conseguir exactamente lo que usan.

Ejemplo de ello es lo ocurrido con la camisa que Joaquín 'El Chapo' Guzmán, exlíder del Cártel de Sinaloa, usó durante su encuentro con el actor Sean Penn en octubre de 2015.
La fotografía del capo, que vestía una camisa de franjas plateada y azul mientras estrechaba la mano del también activista estadunidense, dio la vuelta al mundo. Entonces, surgió la pregunta: ¿dé qué marca era la prenda de vestir?
Poco después, Barabas, la casa de hombres a la que pertenecía la camisa, anunció que la camisa usada por 'El Chapo' —y con un costo de 128 dólares— se había agotado.
La estética buchona en las mujeres
La estética buchona en las mujeres es una de las expresiones más visibles, codificadas y polémicas dentro de la narcocultura. Se trata de una construcción visual y corporal hiperfeminizada, lujosa y "provocadora" presente principalmente en las parejas de narcotraficantes.
Un gran sector la considera una extensión del patriarcado, pues se ve a la mujer como decoración, premiada por su lealtad y apariencia. Por otra parte, destaca que a menudo se usa el término “buchona” de forma peyorativa, con connotaciones clasistas y misóginas.
Algunos de los rasgos visuales distintivos de la estética buchona son:
- Maquillaje cargado y contorneado: Ojos marcados, pestañas postizas, labios perfilados (y muchas veces aumentados con relleno).
- Cabello largo y con volumen, a menudo con extensiones, tonos rubios, castaños claros o balayage.
- Uñas extremadamente largas y decoradas, con piedras, brillos o diseños personalizados.
- Moda llamativa y de marca: Vestidos entallados, escotes profundos, tacones altos, bolsos de lujo (Louis Vuitton, Gucci, Michael Kors, etc.), lentes grandes y prendas con logotipos visibles.
En la próxima entrega, Notivox explicará cómo la estética vinculada al narco ha influido en el contenido que a menudo circula en redes sociales.
RMV.