José Ángel Casarrubias Salgado, El Mochomo, presunto líder de Guerreros Unidos, fue trasladado a un hospital de la Ciudad de México luego de que presentó problemas de salud, revelaron funcionarios del gobierno federal.
El Mochomo estuvo bajo observación en el Hospital Torre Médica; según funcionarios federales, José Ángel padece hipertensión, además de estrés, entre otros malestares que presentó.
Después de unas horas y de recibir tratamiento, se ordenó su regreso al Centro Federal de Investigaciones en la colonia Doctores, para continuar cumpliendo con su arraigo de 40 días.
La FGR dio cuenta de lo anterior a la juez Quinto de Distrito de Amparo en Materia Penal, Patricia Marcela Diez Cerda, a quien informaron sobre las medidas que se tomaron para salvaguardar la salud de El Mochomo y evitar la violación de sus derechos humanos.
El viernes, Casarrubias Salgado sufrió un revés judicial, por lo que continúa arraigado. El Séptimo Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito declaró infundado el recurso de queja que interpuso, donde impugnó la decisión de la juez Marcela Diez, quien rechazó otorgarle una suspensión provisional para echar abajo el arraigo que está enfrentando.
Ayer, Adrián Rivera López, juez Segundo de Distrito en Materia de Amparo y Juicios Federales en el Estado de México, otorgó una suspensión de plano y oficio a Sidronio Casarrubias, El Chino, hermano de José Ángel y jefe máximo de la citada organización criminal.
La medida cautelar concedida a El Chino obliga a las autoridades del penal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México, que le presten la atención médica que requiere con base a su estado de salud y los padecimientos que aduzca tener y de acuerdo con las prescripciones médicas establecidas en su expediente clínico.
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