El hombre que la semana pasada fue encontrado sin vida en el lecho del río Santa Catarina, en Monterrey, no ha sido identificado, y su cuerpo permanece sin ser reclamado en el Servicio Médico Forense del hospital Universitario.
La autopsia reveló un hecho violento: Él murió desangrado a causa de una herida por arma punzocortante en el cuello, pero hasta el momento las autoridades tampoco tienen pistas del o los responsables del crimen.
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Los indicios recolectados en el sitio no apuntaban a que se tratara de alguien en situación de calle, pero para la policía resulta extraño que los familiares no lo hayan echado de menos y buscado, al menos por ahora.
Agentes ministeriales han entrevistado a personas que suelen desplazarse o pernoctar en el lecho del río, pero no han localizado testigos. También han revisado cámaras de vigilancia ubicadas en las avenidas Constitución y Morones Prieto.
Ante tales circunstancias, resulta un misterio la forma en la que ocurrieron los hechos, y también cómo llegó la víctima hasta aquel lugar.
El cuerpo fue localizado la mañana del jueves 12 de junio bajo el Puente del Papa, frente a la colonia Independencia y del primer cuadro de la ciudad, a la altura de la avenida Juárez.
De unos 30 años, el fallecido era de complexión delgada y tez clara. Vestía bermuda beige, camiseta deportiva sin mangas y tenis blancos con suela negra.
Estaba bocarriba en una especie de charca sin corriente de agua, a escasos metros de las columnas centrales de la plataforma peatonal.
mrg
