En la cúpula de La Mayiza existió un liderazgo que aunque no compartía el apellido Zambada, aseguran, era considerado por el mismo Señor del Sombrero como un hijo más. Su nombre es Juan Carlos Félix Gastélum y en el hampa sinaloense es mejor conocido como El Chavo Félix.
La confianza que el cofundador del Cártel de Sinaloa depositó en dicho personaje le permitió no sólo consolidarse como uno de los candidatos a suplirlo en la línea sucesoria de la facción, sino también a convertirse en parte de su familia al casarse con Teresa Zambada Ortiz.
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Aunque su vínculo con la familia Zambada data de décadas atrás, no fue sino hasta la captura del septuagenario capo y el estallido de la disputa con Los Chapitos que El Chavo Félix comenzó a acaparar la atención de la opinión pública y de las autoridades, quienes lograron su aprehensión el pasado 18 de enero en la sindicatura de Quilá, al sur de Culiacán.
Casi siete meses después, durante la mañana del 12 de agosto, diversos movimientos en el Centro Federal de Readaptación Social (CEFERESO) No. 1 y en el espacio aéreo mexicano comenzaron a presagiar para Juan Carlos Félix Gastelum un destino igual de desafortunado que el de su suegro: su llegada a Estados Unidos.
El Chavo Félix y su vínculo con la dinastía Zambada
"Los demonios cuando al Chavo se le ofrezca, a los 15 eres un niño, a los 18 eres muy chavo. Don Panchón un día me dijo: 'hijo te dejo encargado, tú cuida de lo tuyo, lo demás déjalo a El Mayo'", se escucha en las primeras estrofas de un narcocorrido dedicado a Juan Carlos Félix Gastelum en 2017.
A lo largo de tres minutos con 25 segundos, el tema narra la historia de un joven cuyas habilidades lo llevaron a estar al frente de un grupo armado conocido como Los Demonios que, de forma explícita, dice pertenecer a la facción que Ismael Zambada García encabezó en el Cártel de Sinaloa.
De acuerdo con información difundida por colaboradores del medio especializado Borderland Beat, el Chavo Félix es hijo de Juan Francisco Félix Ojeda, alias El Panchón, un importante lugarteniente de Lamberto Verdugo Calderón quien, a su vez, fue uno de los principales operadores financieros de El Mayo Zambada.
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Reportes de medios de comunicación locales refieren que Lamberto Verdugo Calderón fue baleado en la sindicatura de Costa Rica en Culiacán en enero de 2009 tras un intento de militares por detenerlo. La agresión provocó su fallecimiento en un hospital del ISSSTE en Culiacán, mientras que dos de sus hombres de confianza fueron arrestados: Sergio Luis Félix Félix y Juan Francisco Félix Ojeda.
Aquella relación del padre del Chavo Félix con las filas del Cártel de Sinaloa marcaron para siempre su vida de modo que, en cuestión de años, siguió sus pasos y se intengró a una nueva generación de pistoleros que también prestaron sus servicios a la familia Zambada.
"Soy un buen chavo, feliz de la vida. Ayuda a mi gente, no conozco envidia cuando me enfiesto deveras me enfiesto. Cuando trabajo yo nunca me rajo, soy el Chavo Félix sin tanto relajo. Tengo dos amigos que son de confianza, uno es Pancho Arce, también Chino Ántrax, cuento con su mano y cuentan con mi mano", se escucha en estrofas de otro narcocorrido dedicado al yerno de El Mayo por parte del grupo Enigma Norteño.
Aunque no se tiene certeza de que Juan Carlos Félix Gastélum perteneciera a Los Ántrax, su cercanía con el líder del violento y mediático brazo armado de Ismael El Mayo Zambada quedó constatada en diversas fotografías que circularon en redes sociales.
Información recopilada por colaboradores de Borderland Beat refieren que tras la caída del grupo de sicarios, El Chavo Félix se concentró en coordinar actividades vinculadas al tráfico de drogas en Sonora.
Al tiempo que escalaba peldaños dentro del organigrama criminal del Cártel de Sinaloa, El Chavo Félix se distinguió por una serie de amoríos que tuvo, entre los que destacó nada más y nada menos que una de las hijas que Ismael Zambada García tuvo con Leticia Ortiz.
Fue cuestión de tiempo para que el romance entre Juan Carlos Félix Gastélum y Teresa Zambada Ortiz se confirmara e, incluso, se retratara nuevamente en narcocorridos dedicados a Juan Carlos Félix Gastélum en donde otros de los hijos de El Mayo ya son nombrados como sus cuñados.
"Presentando El Chavo Félix [...] cuñado y amigo, sé que estás conmigo, el Mayito Gordo de quien yo les digo, con Dios yo me encuentro muy agradecido por haberme mandando unos hijos queridos, yo vivo tranquilo y siguiendo el camino", narra en una segunda parte el narcocorrido de Enigma Norteño.
La guerra en Culiacán y la detención del Chavo Félix
El 25 de julio de 2024, en un hecho sin precedentes, Ismael El Mayo Zambada fue detenido por agentes del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) en un aeródromo cercano a El Paso, Texas.
La incertidumbre y las circunstancias en las que fue aprehendido el cofundador del Cártel de Sinaloa dejaron a su paso un periodo de incertidumbre en Culiacán que terminó por estallar meses después, exactamente el 9 de septiembre.
"Se pidió que no peleáramos contra gobierno, pero que a todo lo que oliera a Chapo lo matáramos", contó una fuente sobre el estallido del conflicto a los periodistas Luis Chaparro y Carlos Raeb Morales para MILENIO.
La disputa entonces fue encabezada por Ismael Zambada Sicairos, alias El Mayito Flaco -uno de los únicos hijos del Señor del Sombrero que nunca ha sido detenido- en contubernio con el Chavo Félix, quien ya se consolidaba como el segundo al mando, y un lugarteniente identificado únicamente bajo el alias de El Comanche.
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Los siguientes cuatro meses al estallido del conflicto, ambas facciones del Cártel de Sinaloa protagonizaron múltiples enfrentamientos armados entre ellas y con autoridades federales. Si bien los operativos coordinados por el Gabinete de Seguridad lograron asestar más golpes a la estructura de Los Chapitos, la suerte para el Chavo Félix se agotó el 18 de enero de 2025.
A través de sus redes sociales, el Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, informó que Juan Carlos Félix Gastélum había sido detenido por elementos de la Defensa y la Guardia Nacional en la sindicatura de Quilá, la cual ha estado históricamente asociada al dominio de la familia Zambada.
Tras ser trasladado al también llamado Penal de El Altiplano en Almoloya de Juárez, Estado de México, un juez federal vinculó a proceso a el Chavo Félix por delitos contra la salud en la modalidad de posesión con fines de comercio de fentanilo y portación de arma de fuego de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas.
Juan Carlos Félix Gastélum permanecía recluido y en espera de la resolución de su caso judicial, sin embargo, antes de que pudiera concluirlo en México, fue trasladado a Estados Unidos junto a otros 26 generadores de violencia que se encontraban en diferentes centros penitenciarios y que eran requeridos por la justicia estadounidense por sus presuntos vínculos con organizaciones criminales.
ATJ
