Por más que haya resistencia a que las celebridades comenten sobre política, hay ciertos nombres que tienen el peso para hacerlo. Sobre todo si son de las personas que más dinero pueden recaudar para las campañas que, como sabemos, en EU, ya están encaminándose a su recta final. Sabemos bien que Joe Biden no quería dejar su candidatura. Sabemos también que el editorial que George Clooney escribió al respecto, con el temor de que Joe no podía ganar ante la óptica actual, fue un gran pivote para que el actual Presidente aceptara hacerse a un lado y permitir una campaña competitiva contra Donald Trump.
Sé bien que la presión no vino solo de las celebridades, quien fuera presidenta de la Cámara de Representantes hasta el año pasado, Nancy Pelosi, ha sido aclamada como una de las grandes razones por las que Biden aceptó retirarse. Pero Clooney es el personaje de más alto perfil que inició esta presión, un enorme riesgo que parece que les ha salido bien a los demócratas.
Así que en su hábitat natural, en el Festival de Cine de Venecia, Clooney fue cuestionado al respecto y por primera vez se pronunció desde su polémico, pero efectivo editorial en el New York Times. “La persona que merece todo el crédito y aplausos es el Presidente, quien ha actuado de la manera más generosa y desinteresada desde George Washington”.
Aunque el tema cuando respondió eso era la promoción de la cinta Wolfs, no se le había podido preguntar al respecto desde que ocurrieron los hechos y aunque su respuesta era de esperarse, la modestia que muestra respecto a su propia influencia política no demerita en absoluto el hecho de su verdadera fama. El tipo de fama correcta es aún una herramienta extraordinaria para efectuar cambios sociales y políticos enormes.