Fue más allá de extraño en su momento estar en un territorio en el que ya existía HBO Max y, a la vez, tener un documento en mi bandeja pidiéndome (en formato legal) que no revelara secretos de la reunión de Friends. Como no se me dan los spoilers, y esto no era realmente una trama que podía ser arruinada de todos modos, no sentí la necesidad de “ganar” esa nota. Sabía bien que HBO Max ya no había podido esperar en Estados Unidos a que llegara la plataforma. Pues ya está aquí, y al ponerme a pensar un poco al respecto veo muchos problemas similares en el horizonte.
Los estrenos enormes seguirán siendo simultáneos dentro de lo posible en lo que se refiere al cine. Pero muchas películas e incluso series que están esperando su turno, ya sea por contrato o por estrategias locales, para llegar a nuestro país regresarán –ya está ocurriendo, de hecho– a lo que nos gustaba llamar con pseudoafecto de humor negro “región 4”. Así que acaté la petición, pero tampoco pude evitar ver y reírme de los memes, los comentarios en redes sociales y básicamente todo lo que hay ahí que los fans ya saben porque lo saben.
Cosas como ¿por qué no se apareció Brad Pitt? ¿Dónde quedó Ben, el hijo de Ross? ¿Cómo demonios le hace Tom Selleck para verse más joven que todo el elenco de la serie?, y mil más son realmente preguntas que flotaron y flotaron en las redes. Eso y la incapacidad de entender que casi dos décadas después la gente engorda o se ve de su edad o se puso Botox. Pero no, el encanto está en verla y gozarla como si no nos hubiésemos convertido en el chismógrafo mundial que somos desde que existen las redes sociales.
@susana.moscatel