Líderes políticos, de opinión y muchos ciudadanos, debaten sobre la nueva forma de hacer política en México al transformarse los partidos en alianzas de cara a los próximos comicios.
Morena encabezó el nuevo camino izquierdista en México a la par de Juntos Hacemos Historia, que ha tratado de reforzar el discurso de Andrés Manuel López Obrador, logrando controlar a los renegados del sistema aunque no han conseguido combatir la pobreza y acabar con la corrupción.
Por otra parte, la oposición aprovecha la oportunidad de recoger la demanda social contra el mismo presidente y su partido.
La realidad es que el presidente es un maestro del marketing político electoral. Ahora entendemos por qué obsequió los registros a Fuerza por México, RSP y PES y México Libre fue castigado por ser parte de los opositores.
Ahora lo que se alcanza a entender es que la alianza opositora está contra el presidente, aunque en la realidad va contra Morena, PT, Verde, Panal, PES, RSP, Fuerza por México y otras organizaciones que apoyan al señor presidente.
Aunque el engaño electoral puede cambiar y absorber el voto útil a su favor porque los tres partidos que nacieron como hijos privilegiados del señor presidente critican todo lo que hace él y su partidos.
Esto nos da a entender que los partidos políticos en México siguen siendo un supermercado de votos y no son una causa de ideología que lleve entre su estrategia política servir a la ciudadanía. Sigue la misma estrategia del priismo cuando creó al PT como escudo contra el PRD. El PRI nunca ha dejado de dominar al país, ahora con una máscara de 4T.
Sarkis Mikel Jeitani
