La inesperada llamada telefónica de Ricardo, un buen amigo desde mi paso por la Universidad me sobrecogió el corazón no sólo por la alegría de volver a escuchar su viva voz sino, además, por la sorpresa de encontrarme con el vasto conocimiento y conciencia plena de un ser humano que vivió y padeció en carne propia, los más graves síntomas del virus SARS-CoV2 (covid-19).
Su experiencia como la de muchísimos amigos y conocidos que han enfermado o padecido la muerte de sus seres queridos, me hicieron recordar aquella pregunta que me lanzara recientemente mi buen amigo y colega Augusto Chacón, quien con su profunda y acuciosa mirada que le caracteriza como director del Observatorio Ciudadano Jalisco Cómo Vamos, volvió a dar en el blanco: ¿Quién está pensando?
Ciertamente tal pregunta, cual espada de dos filos, atraviesa ese espacio público global plagado de preocupaciones y animosidades muy humanas que no nos permiten ver más allá de la coyuntura, esa que no deja de estar siempre marcada por el cortoplacismo de la confrontación política y las reivindicaciones ideologizadas, y que muy poco o nada abonan a comprender la magnitud de los desafíos que nos son comunes y que, todos lo sabemos, nos llevarían a vislumbrar la manera de mantenernos unidos frente a los problemas públicos motivados por la pandemia: la única alternativa que disponemos para mantenerla en una escala aún gobernable para todos y muy alejados de estériles protagonismos.
“Deberías escribir un libro Roberto acerca de lo que está sucediéndonos a muchos con este virus”, me dijo casi como una orden mi amigo Ricardo.
Tan abrumadora responsabilidad social no solo me hizo reconocer los límites de mis propias fuerzas, sino que me llevó a comprender el sentido de urgencia de apelar a la única inteligencia que nos es dable alcanzar a los seres humanos frente a la complejidad de los problemas públicos: la inteligencia colectiva.
Esa inteligencia que requiere cultivarse y forjarse al fuego de la cooperación y la colaboración para comenzar a pensar todos: lo mismo las organizaciones sociales y gremiales, que los centros de investigación, las representaciones empresariales y los gobiernos en plural.