Sin las mañanas de esquí en nieve o las cenas gourmet este Foro de Davos se adaptó a las reuniones virtuales. El encuentro número 51 se tituló: El Gran Reinicio, pero ¿podemos hablar de un gran reinicio?, ¿de un reinicio parejo cuando hay enormes retrasos y, sobre todo, millones de pérdidas?
Durante cuatro días, más de mil 500 líderes de todas las nacionalidades querían imaginar el mundo después de covid-19. “La pandemia representa una oportunidad, inusual y reducida, para reflexionar, reimaginar y reiniciar nuestro mundo”, dijo Klaus Schwab, fundador y presidente ejecutivo del WEF.
Pero desde el día uno, muchos alertaron sobre la no tan amable realidad: sin vacunas, no hay futuro que imaginar. “Nos preocupa el nacionalismo de las vacunas”, dijo Cyril Ramaphosa, presidente de Sudáfrica, y añadió: “Los países ricos se aferran a las vacunas y nosotros decimos: liberen el exceso”.
El continente africano tiene mil 300 millones de personas y unas 600 millones de dosis de vacunas. Mientras, Reino Unido solicitó 367 millones de dosis para más o menos 67 millones de habitantes y la Unión Europea aseguró 2 mil 300 millones de dosis para 450 millones de personas.
Sin vacunas no se detendrá la pobreza y la desigualdad que vienen con la pandemia. La ONU calculó que se empujará a 115 millones de personas a la pobreza en el mundo y que de aquellas que ya vivían con menos de dos dólares al día, más de 700 millones serán afectadas “profundamente”.
En México perdimos 647 mil empleos, dijo la secretaria de Economía, Tatiana Clouthier, en Davos. “El principal problema en este momento es si las personas mantienen la salud o su empleo, el reto que enfrentamos es cómo hacer un balance entre los dos”, añadió.
Sin vacunas no hay balance y para millones de familias no existe la posibilidad de generar dinero. Somos unos 130 millones de mexicanos y se supone habrá vacunas para alrededor de 75 por ciento. El tema, en nuestro caso, es cuándo se logrará esa cobertura.
Ana Botín, presidenta de Banco Santander, fue impecable cuando dijo: “Las vacunas son la política económica más importante de 2021. Nuestra salud, el bienestar social y la economía dependen de la velocidad y eficacia de su distribución en el mundo. Vacunar salvará vidas hoy y empleos mañana”.
Si queremos imaginar en mayo el futuro poscovid-19, fecha en la que se pretende tener el Foro de Davos presencial en Singapur, todos los líderes deben tener un plan claro y transparente de quién se vacuna, cuándo, cuál es el escenario A, B y C. Cada uno necesita conocer los objetivos de sus pares en el mundo y asegurarse de que nadie se quede atrás. Esta vez el pronóstico coincide: el tiempo en la vacunación es dinero o un golpe directo a la economía de la nación que no lo entienda.
@vivircomoreina