De manera irresponsable, algunos funcionarios y políticos de la 4T han rechazado el llamado de los investigadores de la UNAM, que recomiendan nuevamente el uso del cubrebocas ante el aumento de contagios en los últimos días.
Lo que los expertos proponen es volver a utilizar la protección cuando sea necesario, porque aunque se nos había advertido que la enfermedad llegó para quedarse, hicimos caso omiso.
Eso ha provocado un incremento en el número de casos que al día de ayer estaba en 109 activos en Puebla, y si no tomamos las precauciones necesarias de manera inevitable seguirán a la alza.
De la corcholata petista Gerardo Fernández Noroña no me sorprende, porque en plena pandemia nunca respetó los lineamientos de las autoridades sanitarias, ahora meses después y producto de su ignorancia piensa que ya no se necesita.
Se equivoca el diputado Noroña si cree que por obra del espíritu santo el virus del covid-19 va a desaparecer de nuestro país, y la prueba es que cada día hay más gente enferma en todas las entidades.
Para que le quede claro al señor, es más fácil que gane la encuesta de Morena y que sea el candidato presidencial, a que se extinga el coronavirus de nuestras vidas.
Si bien es cierto la emergencia sanitaria como tal ya pasó, tampoco podemos afirmar que estemos libres del covid.
El que de plano está en otra dimensión es nuestro flamante subsecretario de Salud, Hugo López Gatell, quien desdeña la sugerencia de los académicos y hasta les pide no exagerar.
Durante todo este tiempo, López Gatell ha sido un inconsciente que en plena crisis andaba de vacaciones con su pareja, que en otro momento no habría sido algo anormal.
Por fortuna cada entidad se manejo de manera independiente, y algunas más efectivas que otras, pero sacaron adelante esa eventualidad con sus formas y sus recursos.
En el caso del estado, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla se sumó también a la petición de la UNAM, y honestamente le tengo mucha más confianza a instituciones tan respetables como éstas, que a políticos populacheros e ignorantes.