Tras el anuncio por parte de la presidenta Claudia Sheinbaum, de que será en Puebla donde se instalará la planta Olinia, dentro de su Estrategia Nacional de Industrialización y Prosperidad Compartida, la pregunta que muchos se hacen es ¿dónde debe asentarse dicha empresa?
De acuerdo con el propósito del llamado Plan México, se busca "crear empleos bien remunerados, en sectores de manufactura especializada e innovación", y dentro de ese contexto entra la armadora de vehículos eléctricos pequeños y de bajo costo.
Según lo dijo la propia Sheinbaum en su discurso por los primeros 100 días de gobierno, Olinia, significa moverse en náhuatl, y lo que se pretende es integrarse a la cadena de producción, y en un momento dado hasta competirle a los gigantes como BYD y Tesla, lo cual suena aventurado pero ese es otro tema.
Desde el anuncio, muchos nos hemos dado a la tarea de pensar en un predio dónde ubicarla, porque opciones hay muchas, y como lo dijeron ayer los organismos que agrupan a los industriales en la entidad, su instalación vendrá a robustecer al "ecosistema automotriz" conformado por más de 300 empresas del ramo.
A ojo de buen cubero, como se dice coloquialmente, hay una gran cantidad de parque industriales donde podrían construirla, la mayoría de ellos cercanos a la zona metropolitana, pero si la intención del gobernador Alejandro Armenta es reactivar la región de San José Chiapa donde está la Ciudad Modelo es la mejor opción.
En diferentes ocasiones, el mandatario ha señalado que va a modificar desde el nombre por el de Capital de la Tecnología y la Sostenibilidad, tratando de darle un cambio también de fondo, por lo que un proyecto como de Olinia vendría como anillo al dedo, parafraseando al ex presidente Andrés Manuel López Obrador.
Tampoco suena descabellado porque en ese mismo lugar se encuentra la planta de Audi, que desde su gira todavía como electo por Alemania, se comprometió ante los inversionistas a darle un mayor impulso.
Por cierto, y sin ser aguafiestas, deberían modificar la página oficial del gobierno que todavía tiene el Plan Estatal de Desarrollo 2019-2024 donde sigue el nombre de Sergio Salomón Céspedes y ese tipo de detalles no deben escaparse. "El diablo está en los detalles", eso dice el dicho y en este caso alguien no hizo bien su trabajo ya sea por omisión o por descuido, quiero pensar.