Ayer de nuevo una marcha unió las voces de miles de mexicanos que entienden la importancia de todas las instituciones consagradas por la carta magna, ayer de nuevo las voces de la congruencia se hicieron escuchar y pareciera ser que de nuevo serán ignoradas.
Los contrapesos pesan y estorban pero… ¿qué es lo que estorban? estorban a las malas prácticas de gobierno, a las acciones antidemocráticas, estorban a la opacidad y al manejo discrecional no solo de los recursos sino también del poder, son las que dan equilibrio permitiendo la defensa.
Es increíble que se haya enarbolado el discurso que a los delincuentes abrazos y no balazos, pero hacia los ciudadanos que no comulgan con las ideas de la 4T, todo el desprecio y todas las ofensas posibles desde el púlpito de Palacio Nacional.
El INE no se toca, porque es el órgano, primero que nada integrado por ciudadanos libres que sin compromiso alguno se encargan de vigilar todos los procesos democráticos, desde las consultas pedidas por los mismos gobernantes hasta la expresión máxima de la democracia como son los comicios para elegir a nuestras autoridades, elecciones de las que emanaron nuestros actuales gobernantes.
El INAI no se toca, porque es el órgano garante de la transparencia que permite a los ciudadanos conocer de cerca el manejo del dinero que el gobierno administra producto del trabajo de millones de mexicanos, todos pagamos impuestos, desde el simple hecho de comprar productos, hasta el que es resultado del trabajo de todos, el dinero es nuestro, y cedido para su administración a los gobiernos.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación, no se toca, porque hoy más que nunca se ha convertido en un contrapeso que busca que la justicia prevalezca por sobre la irracionalidad de algunos grupos en el poder, porque de no ser por sus resoluciones hoy viviríamos una cuasi dictadura que marcaría un retroceso para nuestro orden, y el desarrollo de nuestro país.
A los delincuentes abrazos… y a nuestras instituciones ¿qué?